Con apenas 24 años, Mateo Bajamich ya ha tenido varias experiencias, tanto positivas como negativas, en el fútbol argentino y en el extranjero. El delantero cordobés, surgido en Instituto, tendrá en Atlético su quinto equipo en su carrera profesional y, según cuenta, llega en un buen momento.

El nacido en Morrison se formó en Instituto, donde debutó en Primera a los 19 años. Después de jugar unos pocos partidos en su primera temporada, logró consolidarse en aquel torneo del 2019-20, luego suspendido por la pandemia de Covid-19, y reanudado con un nuevo formato: en 29 partidos, anotó 11 goles, siendo una de las figuras de su equipo. En octubre de 2020, Houston Dynamo lo compró por poco más de un millón de dólares y lo dejó cedido en el club cordobés hasta finales de ese año.

En 2021, se sumó al club estadounidense, para su primera experiencia en Primera división, jugando la Major League Soccer. Sin embargo, pudo jugar poco: apenas nueve partidos, de los cuales solo en uno arrancó de titular. El poco rodaje lo llevó a buscar una salida, y se sumó a Huracán para la temporada 2022, pero allí tampoco logro encontrar continuidad, jugando solamente, otra vez, nueve partidos.

En 2023, le llegó una nueva oportunidad en la segunda división del fútbol argentino, con los colores de Estudiantes de Río Cuarto, de su provincia natal. Allí, tuvo un gran año, anotando ocho goles en 31 partidos y formando una gran dupla con Luis Silba. Su gran rendimiento le permitió llegar a Atlético, para tener una nueva chance en Primera.

“Es una nueva oportunidad. Revancha no creo, en Huracán no me fue bien no por cosas mías, pero eso queda de lado. Vengo a tratar de hacer lo mejor acá”, señaló Bajamich, en diálogo con LA GACETA, tras su primer entrenamiento con los colores “decanos”.

Antes de llegar al elenco de 25 de Mayo y Chile, recibió un llamado de la dupla Favio Orsi - Sergio Gómez, que encaminó la negociación. “Hablé con el cuerpo técnico, mi representante arregló todo el tema de los papeles después. Me preguntaron un poco dónde me sentía más cómodo, todas esas cosas, y ya habían hablado con un par de jugadores que me conocían, así que les dieron referencias mías también”, reveló el delantero.

Bajamich admite que, en Estudiantes, consiguió lo que buscaba: sumar más minutos, para poder reencontrarse con su nivel. “Es lo que buscaba yendo a Estudiantes, creo que necesitaba jugar. Creo que con continuidad puedo dar lo mejor; en Estudiantes lo tuve, y me pude reencontrar con ese jugador que había sido en Instituto. Me fue bien, y espero hacerlo bien este año”, subrayó el cordobés.

Potente físicamente, Bajamich asegura que se siente cómodo en cualquier posición en el frente de ataque; ya sea siendo la referencia de área o jugando junto a un centrodelantero. “Puedo jugar en cualquier lugar del ataque, me adapto a cualquier sistema que quiera el entrenador”, afirmó, al tiempo que se definió como “buen definidor y potente para adelante”.

Al surgido en Instituto le tocó visitar Tucumán una sola vez, para enfrentar a San Martín; sí le tocó, sin embargo, jugar ante Atlético el último año, por Copa Argentina, en un partido que Estudiantes ganó por 3-1. “Es un club muy lindo, un grande del interior. Siempre juega a cancha llena, y eso también me motiva. Vengo a tratar de aportar desde donde me toque”, consignó.

En lo grupal, Bajamich aclaró que todavía no pudo charlar demasiado con el cuerpo técnico y el plantel sobre los objetivos, pero anticipó que “el equipo va a tratar de dar siempre lo mejor, y estar lo más alto posible, sumar la mayor cantidad de puntos posible”. Y en lo personal, reitera que llega para ayudar al equipo desde el lugar que le toque, tratando de “hacerlo lo mejor posible”. Porque el cordobés sabe que esta posibilidad en el “decano” puede darle un nuevo impulso a su carrera y permitirle asentarse, finalmente, en la elite del fútbol argentino.