Cartas en los árboles de navidad, pasto y agua para los camellos pero sobre todo mucha ilusión. La noche de Reyes llena de magia los hogares de los más chicos y en Tucumán, quienes los esperan no tan solo les hablan a través de los deseos que escriben o dibujan en sus cartas sino en sus pensamientos cuando imaginan cómo sería despertar en el silencio de la madrugada y verlos.

Es el caso de Joaquín, que tiene ocho años y dudas sobre la vida de Melchor, Gaspar y Baltazar. “Yo me hago una pregunta: ¿desde cuándo empezaron a traer regalos?”, dijo el pequeño y agregó: “también quiero saber dónde viven y qué hacen el resto del año”. Él, además, pidió un regalo particular: “quiero una camisa igual a una azul que me trajeron el año pasado, porque es mi favorita y ya no me queda”.

Actividades a la espera de los Reyes Magos

Abraham tiene seis años, está con su mamá en la plaza Urquiza y le cuenta a nuestro diario que este año no tuvo ningún pedido especial. “Quiero que sea sorpresa”, aseguró, mientras su madre agregaba que este es uno de los días que más se esperan en su casa. “Lleva días emocionado y contando los días que llegue el 6 de enero”, dice la mamá.

BUEN GESTO. La sonrisa de los más chicos por ser ayudantes de los Reyes.

Un poco más lejos, también en el paseo público, Benicio camina de la mano de su tía y aunque mide poco más de un metro es un niño precavido. “Le pedí a los Reyes una mochila para la escuela y una cadenita”, indicó señalándose el cuello. Es tímido por lo que prefiere guardarse sus conversaciones imaginarias con los reyes para él mismo.

Luciano tiene nueve años y sus deseos son: “Quiero que me traigan muchos juguetes y también plata”, contó muy risueño. Al lado está su hermano, Francisco, que tiene 11 y un deseo parecido y otro más grande: “Quiero que todos los niños reciban un regalo y que a mí me traigan plata para comprar gemas en mi videojuego”.

Los comercios tucumanos se ilusionan con repuntar las ventas gracias a los Reyes Magos

A sus ocho años, Valentina les pidió unos patines y sí pensó en qué les consultaría si los hallara: “Me gustaría que me digan si están cansados porque tienen muchos viajes”. Mientras que Fran compartió una idea ingeniosa: “si los viera en la calle los invitaría a mi casa así me dejan aquí todos los regalos”.

Zoe también tiene ocho años y con mucha ternura dice que esta vez sólo quiere agradecerles. “Si los conociera les diría muchas gracias por los regalos que me dan todos los años y que si pueden, les lleven juguetes y comida a los chicos que viven en la calle”.

Acción solidaria

En nuestra provincia, por otra parte, los ayudantes de los Reyes Magos tienen tijeras en sus manos. Entre ayer y hoy en la plaza Urquiza, sobre calle 25 de Mayo, se apostaron “Peluqueros en Acción”, una fundación que desde hace cuatro años para esta fecha cortan el pelo a adultos y a niños a cambio de un juguete en buen estado que luego los tres reyes del oriente reparten a pequeños carenciados.

PARA TODOS. Los cortes de pelo fueron para chicos y grandes.

“El tucumano es solidario, sobre todo cuando se trata de arrancarle una sonrisa a un niño”, comentó a LA GACETA Víctor Hugo Jaime, secretario de la organización. Detalló que todos los peluches, autitos, muñecas y cochecitos que empezaron a colmar las mesas expuestas en el lugar, serán destinados a merenderos de San Pablo, Obanta, Tafí del Valle y Manantial Sur.

“La fundación cuenta con gente comprometida porque para nosotros no es un trabajo, esto es solidaridad pura, amor hacia el prójimo, y lo tenemos muy consciente en nuestro trato a las personas porque sabemos las necesidades que pasan. Queremos entregarles amor para paliar un contexto social y económico que ya hace rato viene muy complicada”, agregó.

Mientras que sobre los niños, especiales destinatarios de este proyecto, Jaime remarcó: “ellos solo desean recibir un presente, sobre todo en esta fecha que es mágica por lo que le llevamos esa magia con fotos y videos donde ven que son los Reyes quienes les dejaron sus regalos”.

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Esta acción tiene además un extra porque chicos y grandes dejan sus juguetes en el espacio que se preparó para los cortes de pelo, a la vez que remarcan la importancia de estas movidas solidarias.

“Nosotros sabemos que esto va directo a gente que necesita, además de que un regalo para un niño siempre es bienvenido. Así como mis hijos esperan su regalo, también tienen la ilusión miles de otros chicos y chicas”, resaltó Sebastián que pasó por las manos de los profesionales junto a sus hijos de 10 y ocho años, luego de dejar sus donaciones.

(Producción periodística: Ariane Armas)