La quema de campos es siempre un dolor de cabeza para la población y para los productores que aun cuando trabajan para evitarla, en ocasiones los fuegos suceden.

Los técnicos de la sección Sensores Remotos y Sistemas de Información Geográfica (SIG) de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), Javier Carreras Baldrés, Carmina Fandos, Federico Soria y Pablo Scandaliaris realizaron un nuevo reporte agroindustrial, en el que se relevó la superficie quemada en el área productiva de Tucumán durante la campaña 2023.

Este relevamiento brinda información detallada de los desafíos que enfrenta la región en términos agrícolas.

Las coberturas de cultivos de caña de azúcar en primera instancia, las de otros cultivos como granos, las áreas de pastizales o renovales y las áreas de cobertura natural, sufren año a año las consecuencias de la quema en Tucumán.

El monitoreo de este fenómeno se torna indispensable y es llevada a cabo anualmente por los técnicos de la sección Sensores Remotos y SIG de la Eeaoc.

Lugares

El relevamiento se realizó en las tierras que ocupan las regiones agrícolas de la llanura deprimida, llanura chacopampeana y pedemonte de la provincia durante los meses de junio a noviembre. Se analizó la quema en el cultivo de caña de azúcar, en otros cultivos identificados -garbanzo, trigo, papa y cítricos-, en áreas desmontadas sin especificación de cobertura y en zonas de monte natural.

Los materiales empleados para el análisis fueron imágenes satelitales Sentinel 2A. Se aplicaron metodologías de clasificación multiespectral y análisis SIG, complementados con relevamientos a campo.

Resultados

Los resultados obtenidos indican que durante 2023 se quemó una superficie de 38.900 hectáreas vinculadas al cultivo de caña de azúcar. Por otro lado, el área afectada en otros cultivos identificados llegó a concentrar aproximadamente 80 hectáreas, mientras que las superficies desmontadas sin especificación de uso, alcanzaron 120 hectáreas. Por último, la superficie de monte natural afectada por quema fue de 4.500 hectáreas.

Para la determinación de las áreas sometidas al proceso de quema se analizaron imágenes satelitales Sentinel 2A y 2B, adquiridas entre el 16 de junio y el 18 de noviembre de 2023.

En una primera instancia se enmascararon las imágenes satelitales con el fin de separar las áreas correspondientes a cada cultivo, para lo cual se utilizó la capa temática del área cañera a nivel provincial 1). las capas de otros cultivos como trigo y garbanzo; 2). el cultivo de la papa y el área correspondiente a cítricos. Seguidamente cada una de las imágenes se analizó visualmente, se realizó la digitalización y el cálculo de la superficie de las áreas quemadas, obteniéndose como producto final la capa temática resumen con la información del área cañera quemada, detallada por fecha y por departamento para el caso del cultivo de caña de azúcar, y a nivel provincial general para los otros cultivos y coberturas.

Por último, se corroboraron los resultados con la información de campo. Además del software ERDAS Imagine versión 8.4, se utilizó QuantumGIS versión 3.16.10 para la digitalización y composición de las figuras.