Se cumple hoy un año de la muerte de Candelaria Enrique, la niña de cinco años que fue alcanzada por una bala perdida cuando festejaba Navidad junto a su familia en el barrio Alvear, en Rosario (Santa Fe).
Su madre, Micaela, habló con TN para denunciar que la causa se frenó y que no hay sospechosos detenidos. Pidió justicia por su hija y que el asesino sea encarcelado.
Candelaria era hija única. La medianoche del 25 de diciembre del año pasado, salió junto a sus padres a la puerta de su casa para recibir a Papa Noel y ver los fuegos artificiales. De repente, la pequeña se desplomó y empezó a sangrar. No entendían qué estaba pasando, hasta que vieron que tenía una bala en la cabeza.
“Candelaria no merecía irse de este mundo de esta manera, tenía toda una vida por delante”, lamentó Micaela. Sobre la causa, que aún sigue impune, dijo: “No hay noticias. Hubo dos allanamientos los primeros meses después del hecho, pero todo se frenó”. La Policía arrestó a un hombre al que los vecinos habían visto portar un arma de fuego en otras ocasiones. Sin embargo, cuando se hizo la pericia para ver si era la misma pistola con la que mataron a Candelaria, los resultados dieron negativo.
Pese al sufrimiento, Micaela desea poder conocer a las personas que recibieron sus órganos, ya que cuando falleció pudieron donarlos a dos nenas y un nene que estaban necesitando de un trasplante. “Solo quiero saber que sus hijos se salvaron y tiene una mejor calidad de vida. Me gustaría saberlo”, expresó.
Mañana, junto a vecinos del barrio Alvear y sus seres queridos, inaugurarán un mural con el rostro de la pequeña para pedir justicia y que se tome conciencia de que este tipo de casos se pueden prevenir.
“Solo le pido a la gente que tenga mucha conciencia a la hora de festejar, porque después dejan a toda una familia destruida y sin consuelo. Fue horrible de la forma que se fue mi hija de este mundo, tristísimo. Tenía toda una vida por delante. Era muy alegre, feliz y muy educada”, expresó Micaela.
“Ese asesino nos destruyó la vida, porque hay que llamarlo por lo que es: un asesino. A la hora que agarró el arma y tiró al aire, había una posibilidad de que alguien saliera lastimado, y fue así. Festejen con conciencia y con amor. Y disfruten cada segundo con su ser querido. Solo le pido un favor a toda la sociedad, que cuando levanten sus copas para brindar, pidan que se haga justicia por Candelaria”, cerró.