El enfrentamiento por los frisos del Partenón entre el Reino Unido y Grecia se agravó en las últimas horas y todo parece indicar que hasta el propio primer ministro inglés Rishi Sunak, está siendo sacudido por una interna feroz.

De ser un conflicto diplomático que se acerca a la ruptura de relaciones entre dos países, se ha convertido, igualmente, en una disputa entre conservadores y laboristas. Pero, opina la BBC, La buena relación entre Grecia y Reino Unido ha sobrevivido a las firmes posturas opuestas. Sunak, canceló una reunión con su homólogo griego, Kyriakos Mitsotakis y el partido laborista calificó la situación como “patética”.

En una semana en la que la disputa sobre las antigüedades del siglo V antes de Cristo ha estallado con renovado vigor, las partes se han movido de maneras inesperadas.

Un aire de optimismo impregnaba el Museo de la Acrópolis, describió ayer The Guardian. Por eso Nikos Stampolidis, arqueólogo clásico de profesión y desde hace dos años director de ese museo, está de buen humor. “Ha sido una semana magnífica. Creo que es justo decir que los acontecimientos nos están haciendo avanzar y están a nuestro favor. Tengo esperanzas y mucho optimismo”.

Que los mármoles que atraen a millones de visitantes al Museo Británico no son propios, no hay dudas; tampoco que llevan el signo de robo por parte del embajador Lord Elgin en el siglo XIX que los trasladó y luego los vendió a la gran institución ubicada en el centro.

Londres se niega a devolver esas obras desde hace décadas, que son reclamadas por los griegos: “sin esos frisos en el Partenón es como que se vea a la Mona Lisa por la mitad”, afirmó el primer ministro Mitsotakis griego.

Sunak está ansioso por perfilarse como un defensor de la permanencia de los frisos en Londres. Una alta fuente del Partido Conservador, al que pertenece el primer ministro, declaró: “Nuestra posición es clara; los mármoles de Elgin son parte de la colección permanente del Museo Británico y pertenecen aquí”, da cuenta la BBC. Otras fuentes indicaron que formarán parte de la campaña electoral del próximo año. Algo que también ocurrió en el país del Mediterráneo.

La colección en el Museo Británico representa más de la mitad de las esculturas decorativas del Partenón: 75 metros de los casi 160 que tenía el friso original; 15 de las 92 metopas; 17 figuras parciales de los frontones así como otras piezas de arquitectura.

Se observa pues, que si no es poco lo que demandan los griegos, tampoco lo es lo que perderán los británicos.

Otros robos

1.- En el Museo Británico pasan cosas

Allí se encuentra la Piedra Rosetta (que permitió conocer un jeroglífico clásico), y pertenece a Egipto, robada en 1801 por las tropas del imperio, y que Londres se niega a devolver. “Que el Museo Británico conserve la piedra es un símbolo de la violencia cultural occidental contra Egipto”, afirmó Monica Hanna, decana de la Academia Árabe de Ciencias, Tecnología y Transporte Marítimo, y organizadora de una de las peticiones que reclaman el regreso de la pieza.

Además, China inició sus propias demandas por obras que posee el Museo Británico.

2.- Hace pocos meses Sir Mark Jones fue nombrado director interino del Museo Británico luego de que saliera a la luz el robo sostenido de unas dos mil piezas clave durante años y de que países como Grecia y China cuestionaran la capacidad de la institución para salvaguardar patrimonio histórico y solicitaran la restitución de varias de ellas apropiadas por la institución inglesa. Jones, reconocido museólogo sajón que mucho antes de este nombramiento proponía, por ejemplo, compartir con Grecia los mármoles del Partenón apropiados por Gran Bretaña, fue nombrado en reemplazo de Hartwig Fischer, quien renunció el 25 de agosto último a la dirección del Museo Británico, tras conocerse los robos sistemáticos de importantes piezas históricas que evidenciaron fallas en el sistema de seguridad. En octubre se recuperar alrededor de 350 piezas de las 2.000 sustraídas. Curiosamente, estas piedras preciosas, cristalería y joyas formaban parte del departamento de Grecia y Roma, informó el propio museo. Mientras dirigía el Victoria & Albert Museum, Mark Jones se posicionó sobre el tema: “Creo que sería posible desarrollar algún tipo de consorcio que permitiera exhibir las piezas en sitios diferentes. No creo que sea necesario transferir la propiedad o simplemente devolver los mármoles sin más”.

El público

El ex ministro de Cultura británico, Lord Vaizey, comentó a la BBC que la pareció “raro” que Subnak hubiese cancelado la reunión. Vaizey, que preside la junta asesora del Proyecto Partenón, dedicada al retorno de los frisos a Grecia, indicó que la actitud del primer ministro está ligada a una tradicional guerra cultural “donde cualquiera que diga que la historia británica no fue perfecta, de alguna manera no es un patriota”. Según él, “por lo que veo, cada sondeo del público británico dice que creen que los fríos deberían ser retornados”.