En diferentes ámbitos de nuestras vidas en el trabajo, con la familia o la propia pareja, nos encontramos con situaciones que nos molestan de las otras personas. Son decisiones o actitudes que nos irritan demasiado y a las que la psicología identifica dentro de la denominada "ley del espejo". ¿Qué significa? ¿Qué nos muestra el otro de nosotros mismos? ¿Cómo aprovechar ese mensaje?
La idea de que las molestias hacia los demás pueden ser un reflejo de nuestro propio mundo interno se ve en muchas escuelas de psicología, dónde se sugiere que cuando alguien nos irrita profundamente podría estar actuando como un espejo que nos muestra aspectos no resueltos o conflictos internos.
En otras palabras: lo que nos perturba en los demás podría estar relacionado con nuestras propias inseguridades, miedos o expectativas no cumplidas.
Eso que te molesta de los demás dice cosas sobre vos: ¿cómo descubrirlo?
Cuando alguien nos genera molestia, es importante recordar que, en lugar de señalar con el dedo, podemos tomarlo como una oportunidad para el autoexamen y la reflexión.
Para preguntarnos por qué hay ciertos comportamientos o palabras que nos afectan tanto, puede conducirnos a un mayor autoconocimiento y crecimiento personal.
¿Qué aspecto de nosotros mismos se ve amenazado o desafiado por la acción de la otra persona? ¿Cuáles son nuestras propias expectativas y cómo influyen en nuestras reacciones emocionales?
Si nos hacemos estas preguntas, tal vez, podemos comenzar a comprender por qué ciertas personas nos provocan rechazo y qué revela eso acerca de nosotros mismos.
"Ley del espejo": cómo funcionan las proyecciones
En muchas ocasiones, nuestras percepciones y respuestas ante las acciones de los demás pueden hacer que un conflicto crezca o que perdure en el tiempo. Es decir que, de alguna manera, ese problema no se produjo por azar, sino que nosotros mismos lo buscamos.
Pero, por otro lado, cuando tomamos consciencia de lo que proyectamos en los otros, podemos descubrir nuestra propia realidad. Cuando vemos esto, podemos gestionar lo que pasa en nuestro interior, para poder hacernos cargo de eso, y trabajar esos aspectos de nuestra vida.
Si sabemos utilizar esto a nuestro favor, podemos descubrir las cosas que no nos gustan de nosotros mismos, nuestro lado oscuro, y trabajarlo, lo que nos ayudará a salir de un estado de ego, o de sobrevaloración.