En La Ciudadela, todas las energías están puestas en la temporada 2024. A una semana del día estipulado para el regreso del plantel profesional a las prácticas, la comisión directiva de San Martín de Tucumán sigue adelante con el balance sobre lo que fue la temporada. En ese sentido, uno de los puntos a apuntalar será el físico-médico.

Los dirigentes recibieron un informe detallado con las lesiones que se produjeron durante las últimas dos temporadas con un dato alarmante: fueron 118 en total, con distintos grados y tiempo de recuperación. Esos números, por encima de la media para cualquier club, alertaron a la CD, que tiene decidido avanzar con el proyecto de un nuevo departamento médico.

La idea principal es que este grupo trabajé en conjunto para generar una línea de entrenamientos que se implemente tanto en el plantel profesional como en todas las categorías de inferiores. Así, el nuevo entrenador que llegue a Bolívar y Pellegrini, deberá estar de acuerdo (y acoplarse) a una estructura que se pondría en marcha en las próximas semanas.

“Hubo 10 cirugías en un año, por las que el club debió pagar una fortuna. Esto se resume en ocho desgarros de cuádriceps; 15 de isquiotibiales y siete lesiones de ligamentos cruzados anterior, de las cuáles se vuelve en forma óptima en siete meses. Sin embargo, todas tuvieron un tiempo de baja de 9-10 meses”, reza el informe que recibieron los dirigentes.

No sólo fueron muchas (y variadas) las lesiones; sino también que en muchos casos los nombres de los futbolistas se repitieron. “Es un problema que va más allá de un partido. Hay que trabajar para bajar esos números”, le indicaron a los dirigentes, sobre todo porque más allá de la pérdida deportiva, el inconveniente también afecta en lo económico.

En lo que respecta a números y nombres la situación se vuelve más compleja. En 2022 hubo un total de 73 lesiones y las posiciones de mayor incidencia se dieron en la zaga de centrales y en los extremos, con un 19%. Mientras que en lo que respecta a esta temporada, hubo 45 con el predominante nuevamente en los extremos; esta vez, con un 30%.

En 2022, Nicolás Sansotre -que hace poco firmó la rescisión de su contrato- fue el que más lesiones sufrió, con un total de cinco. Lo siguieron en la lista Tino Costa (4), Hernán Pellerano y Juan Orellana (3). En tanto que para esta temporada, bajo las órdenes de Iván Delfino y Pablo Frontini, el lateral derecho Ismael Quilez fue el que más debió pasar por la enfermería; ya que sufrió cinco lesiones. Nicolás Carrizo, Matías Kabalín, Agustín Prokop, Gervasio Núñez y Nahuel Banegas lo siguieron con dos, a lo largo de la Primera Nacional.

Con respecto a la rotura de ligamentos cruzados, el quirófano “santo” tuvo bastante movimiento. En 2022, hubo cuatro cirugías de ese tipo (Orellana, Gonzalo Gutiérrez, Darío Sand y Sansotre). Mientras que durante este año, Kabalín y Juan Imbert fueron los que sufrieron esa lesión.

GESTOS DE DOLOR. En Marzo de este año, Juan Imbert sufrió la ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha contra Agropecuario. CAPTURA DE VIDEO.

De acuerdo al informe (y si bien se hace una especie de promedio debido a que son lesiones que muchas veces son a causa del azar), en los clubes hay una media de dos lesiones ligamentarias por temporada. Por eso, en La Ciudadela están alertas respecto a lo que sucedió en el último tiempo.

La lesión más común en las últimas dos temporadas fue de grado muscular/tendinosa localizada en el miembro inferior. “Esto se da porque los trabajos no se realizan de manera correcta”, le explicaron a los dirigentes.

Tomando en cuenta estos antecedentes, la CD evalúa los pasos a seguir. Mientras trabajan en la elección del entrenador que tendrá a cargo el armado del próximo plantel, también apuestan a cambiar otras cuestiones. En ese sentido, las áreas médicas y físicas sufrirían grandes transformaciones en las próximas horas.