La creación de Alejandro Ávila deja una idea rondando para seguir dotando de fiesta a la exigencia deportiva del Torneo de Las Cañas. “La terminé anoche. Usé tela alpillera, pintura acrílica y papel crepe”, detalló el marido de Julieta del Río, jugadora de la Secta FC. El caballero de 44 años fue el autor de la bandera que custodió el interior del banco de suplentes y que se destacó en el predio por ser la única hecha a mano. Un lindo desafío para los próximos torneos. Porqué no trasladar una sana competencia del campo de juego al costado de la cancha para elegir a la bandera más linda.

Todo el equipo, amigos, familiares y el autor mismo estaban orgullosos del “trapo”. La bandera tenía una pinta bien artesanal. No tenía ningún patrocinador de por medio, ni tampoco algún indicio de que se haya usado máquina industrial que imprimiera prolijamente el escudo “sectario”. “Siempre las vengo a alentar, desde este lugar de hincha. La bandera simboliza todo el esfuerzo de un año y que las chicas llegaron merecidamente a la final”, destacó Ávila que es uno de los varios maridos que siguen a sus chicas, finalistas de la Copa de Plata en Fútbol 5.

AVILA. Mostró y festejó su creación. LA GACETA / JOSÉ NUNO

“Nos acompaña siempre. Ninguno hizo algo como él”, reconoció y destacó Julieta, que según su marido juega como un cinco que sube y baja. “Es el acompañamiento de él de todo el año, es su modo de demostrarnos eso”, explicó Del Río antes del calentamiento para enfrentarse a Antrax FC.

La dama dejó resumido en palabras lo que también condensó esa bandera. “Esto ya se convirtió en un estilo de vida. Es nuestra actividad de los sábados”, dijo con cariño Del Río.