El intendente de Concepción, Alejandro Molinuevo, comenzó a padecer los primeros sinsabores de tener un Concejo Deliberante con mayoría opositora. Ayer el cuerpo vecinal sesionó y resolvió pasar a comisión el tratamiento del presupuesto 2023 elevado por el jefe municipal.

Tomó la misma decisión con las ejecuciones presupuestarias de este año y con la designación del Contador General del municipio. La postergación del tratamiento del presupuesto, principalmente, ensombrece la administración municipal en vista a la eliminación del Pacto Social en 2024. Los temas tenían dictamen favorable del anterior cuerpo vecinal.

Con ojo crítico

Sin embargo, Molinuevo no logró que se los aprobaran. La oposición, que era minoría, se empeñó en postergar su tratamiento, y trasladarlo para el actual, no dando quórum. El panorama en esta gestión parece más complicado. El peronismo, ahora mayoría con un bloque de ocho ediles, está decidido a escarbar hasta los últimos detalles del presupuesto y de las ejecuciones que, según afirman, “están flojos de papeles”.

Así las cosas el jefe comunal viene administrando con el presupuesto del año pasado. “No se pueden aprobar informes que fueron revisados por el anterior Concejo. Nosotros tenemos la obligación de ponernos al tanto para recién determinar si se lo aprueba o no. El presupuesto tendría que haber sido presentado en mayo y, en cambio, se lo hizo en julio. Estuvo ‘cajoneado’, junto con las ejecuciones, hasta los últimos días de la anterior gestión”, dijo Federico Fúnez, titular del Concejo.

“Molinuevo quiso apurar su aprobación cuando viajó a Francia, pero se equivocó. Dejó a su bloque con un concejal menos al asumir interinamente la intendencia Carlos Zelarayán. Entonces quedó sin quórum propio”, precisó por su parte el concejal Pedro “Tano” Albornoz. “Aunque el intendente se comprometió a mantener una relación fluida con el cuerpo, poniendo a disposición todas las documentaciones y pedidos que le formulamos, lo cierto es que mantiene una comunicación nula con nosotros”, acotó.

Trabajos en riesgo

El edil oficialista Francisco Herrera, ex secretario de Gobierno, dijo que llama la atención la actitud de los opositores, que ponen en tela de juicio el presupuesto y las ejecuciones del 2023, “cuando fue el mismo gobernador, Osvaldo Jaldo, quien en un encuentro con Molinuevo elogió la administración de este municipio diciendo que no iba a tener problemas con el levantamiento del Pacto Social porque estaba en orden”. Para el concejal la actitud del bloque peronista “conspira contra la administración y la gobernabilidad del municipio”.

“La intendencia se está manejando con el presupuesto del año pasado. Y si no se aprueba el actual se tendrá que seguir con aquel. Esto complica la gestión en vista a la eliminación del Pacto Social”, advirtió. “La inflación elevada imposibilitará la obra pública y el cumplimiento de las obligaciones salariales. Y hasta conduciría a la reducción de personal. Así las cosas esperamos una actitud responsable de la oposición”, remató.

Molinuevo había gestionado un encuentro con Jaldo y los ediles. Al parecer quería limar asperezas y comprometer a los opositores a un trabajo aunado y “sin obstáculos” hasta 2027. Aunque la reunión se anunció públicamente para la semana anterior, se suspendió sin nueva fecha