MANAOS, Brasil.- Los incendios arrasan de nuevo el mayor humedal del planeta, esta vez en una época atípica. Es noviembre y el fuego arrasa el Pantanal de Brasil, en la frontera con Bolivia y Paraguay, cuando ya debería haber empezado la estación de lluvias. Pero desde el cielo no se atisba ni una nube la humareda que toda la región por cientos de kilómetros.
En lo que va de año, más de un millón de hectáreas del Pantanal fueron pasto de las llamas, el triple que en todo 2022. Es una superficie equivalente a más de 16 veces la ciudad de Madrid o 6,5 veces San Pablo.
El Instituto Brasileño de Investigaciones Espaciales, que capta imágenes vía satélite, dijo que detectó unos 3.000 focos de incendio, el peor dato en 21 años.
La ola de calor, los fuertes vientos y la sequía han alimentado las llamas y están acabando con gran parte de la biodiversidad de la región.
Pantanal es el mayor refugio de jaguares del mundo. La mitad de los jaguares del mundo vive en Brasil, y la mayoría están concentrados en este, el gigantesco humedal.
Ahora, los incendios están devorando el hogar de este felino, una tragedia ambiental que se repite cada año en la estación seca, pero que ahora está batiendo récords por una sequía más prolongada de lo habitual y los efectos de El Niño, que estos días deja en Brasil una ola de calor histórica.
El veterinario Enderson Barreto, explicó: “Si no hay un plan urgente de intervención y preservación, lamentablemente el año que viene estaremos aquí nuevamente sufriendo todo esto que estamos viviendo hoy. Caminamos por el Pantanal y hoy parece un cementerio al aire libre”.
A más de 2.000 kilómetros al norte, otra región brasileña rica en biodiversidad, la selva amazónica también se enfrenta a un período de grave sequía e incendios forestales, provocados en su mayoría por miles de “queimadas”, los incendios forzados por agricultores y mineros, reportó una agencia de noticias.
La semana estuvo marcada por un nuevo récord de calor en Río de Janeiro, donde las temperaturas superaron los 42°C, con una sensación térmica por encima de los 50°C.
Incendios forestales
Para los próximos días la previsión es de tormentas eléctricas en las regiones de San Pablo, Río de Janeiro y Mato Grosso.
El Pantanal es la llanura inundable más grande del mundo, pero su paisaje cambia radicalmente a lo largo de los meses. El fuego vuelve cada año, pero normalmente el pico de incendios se da entre agosto y septiembre, en el clímax de la estación seca.
En noviembre, con la temporada de lluvias, la vegetación obtiene una tregua y empieza a reverdecer; cuando las lagunas empiezan a llenarse.
Muchos incendios son provocados para abrir espacio para la ganadería y la agricultura (sobre todo la soja, esta región es el granero de Brasil), pero también hay un factor natural.
Este humedal lleva ardiendo sin freno desde hace casi un mes, pero en los últimos días hubo un salto de escala: las llamas llegaron a la Transpantaneira, la ruta de 150 kilómetros que ejerce como columna vertebral alrededor de la cual se sitúan la mayoría de haciendas que trabajan con ecoturismo.