NUEVA YORK, Estados Unidos.- La Asamblea General de Naciones Unidas aprobó por abrumadora mayoría una resolución para exigir el fin del embargo económico y comercial estadounidense contra Cuba que ya ha superado seis décadas, a la que únicamente se opusieron dos países: Estados Unidos e Israel.
El llamado, que viene haciéndose desde hace 31 años, recibió esta vez 187 votos a favor, dos en contra y una sola abstención, la de Ucrania, resultado más aplastante que el del año pasado, cuando hubo tres abstenciones y los mismos votos negativos.
Al completarse la votación y aparecer los resultados en la pantalla gigante de la Asamblea, muchos de los delegados prorrumpieron en aplausos. El canciller cubano, Bruno Rodríguez, que intervino antes de la votación ante la Asamblea, denunció que el bloqueo viola el derecho a la vida, la salud, la educación y el bienestar de todas las cubanas y cubanos, y es “un acto de guerra en tiempo de paz”.
La Asamblea celebra cada año una sesión para pedir el fin del embargo impuesto en 1962 y que impide a Cuba hacer transacciones en dólares, comercializar productos que atraviesen Estados Unidos y que tengan un mínimo del 10% de partes elaboradas en ese país, así como utilizar el sistema financiero norteamericano.
Los países que intervinieron en la Asamblea en apoyo a Cuba -muchos de ellos sólidos aliados de Estados Unidos en el mundo- insistieron en que el embargo es una medida unilateral, pues no ha sido decidido por el Consejo de Seguridad, supone una injerencia en otros estados y termina castigando sobre todo a la población de Cuba, antes que a su gobierno.
Sin embargo, según la cadena alemana DW, esta votación pone en evidencia la irrelevancia de la Asamblea General -más allá del valor simbólico-, que lleva 31 años aprobando una resolución similar sin que haya conseguido hacer mella en la política estadounidense para con la isla caribeña. (Especial)