Los frutos secos son una fuente inigualable de nutrientes. Además de tener un sabor increíble, destacan por su gran cantidad de nutrientes, claves para un buen rendimiento deportivo y una vida sana. Pero hay formas en que consumirlos puede potenciar los beneficios que brindan.

La ausencia de grasas insalubres y de sal hacen que los frutos secos tengan un plus por sobre otros alimentos. Son versátiles ya que pueden consumirse en cualquier momento del día en reemplazo de otras opciones menos sanas.

En este grupo de alimentos se encuentran las nueces, almendras, castañas de cajú, frutas pasas, avellanas, dátiles, semillas de girasol, pistacho y muchos más. Entre sus beneficios, combaten el estreñimiento, ayudan con la pérdida de peso, protegen el corazón y combaten la anemia.

Tips para consumir frutos secos

1. Activar los frutos secos: remojarlos entre 6 y 12 horas en agua abundante, cambiar el agua dos o tres veces durante ese tiempo y enjuagar y escurrir.

2. Para hacer grandes cantidades para guardar y evitar que se llenen de moho, es indispensable secar las semillas y sacarles toda la humedad posible.

3. La germinación y plantación es otra forma de incentivar el consumo. Con una primera compra de frutos secos, se puede dar el siguiente paso después de la hidratación: la germinación. Con los primeros brotes expuestos, las semillas pueden ser plantadas en pequeños contenedores con tierra, como cubeteras plásticas.

4. Preparar un mix o granola y separarlos en pequeñas porciones puede propiciar la inclusión en la dieta diaria. Tener a mano una pequeña cantidad de frutos secos es más fácil que ir a cualquier negocio a comprar un chocolate.

5. Hay horarios en que resulta más provechoso consumir un puñado de frutos secos. Un puñado de almendras o nueces son una excelente opción para empezar el día con energía. Los frutos secos también son un aperitivo saludable y satisfactorio para combatir el hambre a media mañana. Además, a la hora de la merienda, una porción acompañada de alguna fruta proporcionan la energía necesaria para terminar el día sin sensación de pesadez.