En medio del contexto de tensión y de máxima alerta ante amenazas terroristas que estuvo viviendo Francia durante los últimos días, el Palacio de Versalles sufrió su sexta amenaza de bomba en la semana.

Ayer, pasado el mediodía, los portavoces del establecimiento informaron lo sucedido a través de su cuenta oficial de X. “Los visitantes del Palacio de Versalles han sido evacuados por motivos de seguridad. Se reabrirá una vez se realicen las comprobaciones pertinentes. Agradecemos su comprensión”. Dos horas después, llevaron tranquilidad a los usuarios preocupados, avisando que no había peligro alguno y que todo fue una falsa alarma. “Las comprobaciones ya están completas. El Palacio ya está abierto”, publicaron.

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Con la de ayer, ya son seis las intimidaciones que recibió el Palacio de Versalles durante esta semana. Éstas contínuas amedrentaciones empezaron hace nueve días, luego de un ataque islamista que tuvo lugar el pasado 13 de octubre en un liceo de Arras, una ciudad ubicada al norte de Francia. Un joven de 20 años entró armado con un cuchillo a la institución y asesinó a un profesor e hirió a un agente de seguridad y a otro docente mientras gritaba “Allah Akbar” (Alá es grande, en español).

Desde entonces el país se encuentra en máxima alerta terrorista, por lo que el Gobierno reforzó la seguridad de lugares sensibles, como las sinagogas, los centros educativos, los transportes y los sitios turísticos y movilizó a 7.000 soldados más para que realizaran tareas de vigilancia.

Sin embargo, la incrementación de la seguridad no fue suficiente para frenar las amedrentaciones, ya que las llamadas con falsas amenazas comenzaron un día después del ataque en Arras. Los objetivos del primer día fueron el Museo del Louvre, el Palacio de Versalles y la parisina Estación de Lyon, que fueron punto blanco en reiteradas oportunidades posteriormente. El pasado miércoles, comenzaron a recepcionar las amenazas los aeropuertos de distintas ciudades del país, hasta llegar a las 17 intimidaciones.

Hasta el momento, hay 22 procedimientos judiciales abiertos por las amenazas. El jueves, el ministro del interior Gérald Darmanin, anunció que 18 personas, “esencialmente menores”, fueron detenidas por estas falsas alertas.