Las situaciones decisivas siempre son difíciles de afrontar. Las adversidades y los desafíos toman mayor dimensión, provocando un gran desgaste en el afectado. Esto crece cuando hablamos de fútbol, por la incertidumbre misma del resultado. Ante esto, la única respuesta es luchar; y Leonel Pierce está dispuesto a dejar todo para lograr el ascenso vistiendo la camiseta de San Martín. “La exigencia es propia de la magnitud que tiene el club”, introduce el ex Deportivo Maipú. El mediocampista arribó al “santo” en el mercado de pases invernal y se convirtió en una de las principales piezas de rotación del esquema de Pablo Frontini.

Si bien debutó como profesional en Racing, la opción de llegar a Bolívar y Pellegrini es uno de los desafíos más apasionantes que tuvo en su carrera como profesional. “Todos los que decidimos venir a Tucumán, sabemos que San Martín es un equipo importante. Siempre que venís a enfrentarlo en La Ciudadela, ves la cantidad de gente que lo sigue y eso te sorprende. Querés que te toque estar de este lado. Por suerte, lo estoy haciendo y en un momento donde nos jugamos todo. Llegué hace poco pero parece que estoy hace años”, explicó.

Pero todo no fue color de rosas en la historia deportiva de Pierce. Su última experiencia en el exterior le dejó un sabor amargo. “No me sentía cómodo en Paraguay. Sobre todo, no me sentía tranquilo”, comentó en relación a su breve paso por General Caballero.

Así, la opción de llegar a la provincia calzó como anillo al dedo. “Tucumán me sorprendió. Ahora, estoy viviendo en Yerba Buena y tengo la tranquilidad que buscaba. A la larga, eso influye en el rendimiento que tenemos los futbolistas”, dijo.

Los cerros tucumanos cautivaron a Pierce por su serenidad. “Con mi novia siempre buscamos lugares para ir junto a nuestra perrita. Para nosotros es nuestra hija y la llevamos a lugares donde hay mucho silencio. Lo que me encantó fue Villa Nougues. Siempre que vamos subimos a la iglesia que está arriba. También, fuimos a Loma Bola y vi los parapentes. Es algo impagable la tranquilidad que tenes en esos lugares”, contó.

A pesar de su gusto por la quietud, lo cierto es que el desafío que le propuso San Martín lo apasiona y lo carga de responsabilidades. “La gente quiere ascender como todos nosotros. Es nuestro sueño como grupo. Siempre uno busca la gloria más que lo económico. Queremos ser parte de la historia del club. Esa exigencia la tomamos al llegar”, indicó. “Es el momento en el que todos los que somos San Martín tenemos que buscar ser uno. Jugadores, cuerpo técnico, hinchas y dirigentes tenemos que tirar todos para el mismo lado. Es el único modo que tenemos para lograr lo que todos queremos”, añadió.

El momento que atraviesa el “santo” no es esquivo a los jugadores. El mediocampista reconoció que los resultados de las últimas cuatro fechas no se dieron por factores futbolísticos. “Entendemos que el hincha es pasional; que no le importa el cómo, sino ganar. Pero esa ansiedad la tenemos que saber manejar para no desesperarnos. En el fútbol, los rivales también juegan. No se trata de decir: ‘soy San Martín’ y mágicamente ganas. Es más complejo que eso. Siempre jugamos para ganar. Pero como te puede salir bien puede salir mal y que lo hecho en la semana no funcione”, expresó.

A pesar de que los resultados no lo acompañaron, el ex Santamarina tuvo un gran rendimiento frente a Almirante Brown y Defensores de Belgrano. “Me sentí bien estos dos partidos. Pero si el equipo no gana, eso queda como una sensación individual. Algo mal tengo que estar haciendo para que no se den los resultados. Lo grupal siempre va a estar por encima de lo individual”, dijo.

En relación a ello, recordó el partido frente al “dragón” y explicó los factores que causaron la derrota. “Veníamos controlando bien el partido hasta los últimos 15 minutos. Estábamos de visitante, en una cancha chica y, si bien nadie quiere excusarse en el árbitro, cualquier foul chiquito te mete dentro del área. Sin el penal, no tenían situaciones claras. Te queda bronca por todo el esfuerzo que hicimos”.

“Para lo que viene tenemos que borrar la página y seguir. El grupo está tranquilo y sabe todo lo que puede dar. Sabemos que Riestra va a ser duro y es un equipo muy inteligente, pero vamos a buscar ganar. Tenemos la convicción de que podemos lograr el ascenso”, agregó.

Antes de finalizar, Pierce aseguró que la Primera Nacional es una de las categorías más parejas del fútbol argentino. “En el Reducido todos son rivales difíciles. Chacarita y Maipú hicieron muchos puntos, jugando dos partidos menos que nosotros. Pero son partidos mano a mano en el que, si no te salen las cosas, te quedas afuera. ‘Cuco’ en B Nacional no hay. Pero para lograr el objetivo tenemos que mantener nuestra fortaleza en La  Ciudadela y saber cuándo golpear cuando juguemos de visitante”, finalizó.