“El tipo de cambio de convertibilidad, que es la relación entre pasivos en pesos y las reservas brutas, asciende a $ 1.000 por dólar. Considerando que ha mantenido un comportamiento parejo con el contado con liquidación, el valor implícito induce a pensar que las cotizaciones paralelas aún tienen un recorrido alcista por delante”, plantea la consultora LCG. Desde esa orientación, en el mercado se preguntan: ¿cuánto tiempo más demandará a la divisa estadounidense llegar a ese valor en las pizarras?

Antes que poner una fecha exacta en la que la cotización informal del dólar alcance los $ 1.000, hay que considerar el contexto y en este punto es crucial la escalada inflacionaria y la incertidumbre electoral, expresa a LA GACETA el economista Eduardo Robinson. 

Massa anunció el "Dólar PyME" para incentivar el ingreso de divisas al país

“Como la inflación seguirá acercándose, consecuencia directa de la salvaje expansión monetaria que lleva adelante el ministro y candidato Sergio Massa, ni hay forma de contener las expectativas y como todo parece indicar que habrá segunda vuelta electoral se potenciarán las incógnitas preelecciones”, puntualiza. Por lo tanto, antes de las elecciones del domingo 22 el dólar tocará y hasta es probable que supere los $ 1.000, proyecta el consultor. 

En ese interregno es probable que el Banco Central consiga aportes de divisas a través del esquema denominado “dólar Vaca Muerta” y también del prorrogado esquema del “Dólar Soja 4”, con lo que se intentará frenar la ola dolarizadora. Por eso, dice Robinson, el “Plan Platita” no tendrá efectos reales en alentar el consumo porque lo licuara la inflación. “El problema es que el componente inercial de la inflación se ha potenciado con los dos dígitos de agosto y septiembre, sin bien falta el porcentaje preciso. Las consecuencias pueden repercutir en los bancos, dado que no se modificó la tasa de plazos fijos”, acota.

El dólar "blue", imparable: subió más de $30 y superó los $840 este miércoles

Federico Vacalebre, economista y docente de la UCEMA, señala que resulta difícil establecer temporalmente un precio porque eso responde a una multiplicidad de variables, como el ajuste en el tipo de cambio oficial, una devaluación, la cantidad de operaciones en los mercados alternativos o la velocidad con que se dolarizan las carteras en pesos. 

“Lo que sí está más que claro es que, de un tiempo a esta parte, el dólar se ajustó de una forma fenomenal hasta llegar a los $ 850 como el caso del Contado con Liqui, con lo que aquellos ajustes pueden darse también en la previa al domingo 22”, indica a nuestro diario. Además, acota el consultor, en el mercado sobran pesos y faltan dólares por lo que esta situación también puede resultar un factor de presión sobre los tipos de cambio, además de profundizar el agujero fiscal del país, en un escenario de elevada inflación.