Los tucumanos, riojanos, santiagueños, salteños, jujeños, catamarqueños y cordobeses que pretenden ser reconocidos como españoles en virtud de la Ley de Memoria Democrática -LMD también conocida como Ley de Nietos- deberán ser muy pacientes, a menos que haya un cambio rotundo en la oficina consular que interviene en el trámite.
Según Lorena Suárez, secretaria general del PSOE Argentina, el Consulado de Córdoba casi no expidió nacionalidades a diferencia de lo que ocurrió en las otras cuatro dependencias existentes en otras zonas del país. “La mayoría de peticiones introducidas allí están trabadas y demoradas”, informó la dirigente tras hacer una visita, y entrevistarse con el cónsul Javier Ignacio Martínez del Barrio, miembros de su equipo y solicitantes afectados.
Suárez aseguró que la situación del Consulado de Córdoba preocupa al PSOE, partido que gobierna España en alianza con otras fuerzas políticas y que se propone continuar en el Palacio de la Moncloa de la mano de Pedro Sánchez luego de los intentos fallidos de investidura de Alberto Núñez Feijóo (la última tentativa fracasó el viernes).
Y anticipó que ella informará por escrito lo que llegó a constatar de manera directa. En forma previa, fuentes vinculadas a esta gestión que abre las puertas de la Unión Europea a un número inmenso de tucumanos, habían indicado que el Consulado avisaba que podía tomarse hasta dos años para inscribir las solicitudes.
“En Córdoba hay una forma de organizar el trabajo que debe ser revisada porque una cosa es que seas lento y otra que no saques ninguna nacionalidad”, expresó la secretaria general para la Argentina durante la entrevista remota que concedió a LA GACETA. Según sus cálculos, el padrón de votantes residentes en la Argentina podría duplicarse si se otorgan todas las nacionalidades de la Ley de Memoria Democrática.
El PSOE (Partido Socialista Obrero Español) nació hace más de 140 años. “Tiene 80 años de vida en nuestro país y es la agrupación más grande fuera de España por el hecho de que la mayor cantidad de inmigrantes está aquí. Durante el franquismo y en la posguerra, la entidad argentina fue muy activa porque el partido estaba proscripto en el territorio español”, apuntó Suárez, que es secretaria del PSOE Argentina desde 2021 y se autodefine como “sanchista”.
}Durante la conversación, la dirigente socialista dijo que el líder histórico de su partido, Felipe González, “la viene pifiando” al sostener una visión bipartidista de España que ya no existe: “esta España es mucho más diversa y confío en la habilidad de Sánchez de armar un nuevo gobierno de coalición porque ya lo hizo”. En ese tren, Suárez llamó a no tener miedo a negociar temas espinosos como la amnistía de los políticos catalanes que propiciaron el referendo independentista de 2017.
- ¿Cómo le fue al PSOE en la Argentina en las últimas elecciones?
- Para contestar la pregunta tengo que historizar un poco porque hace más de 14 años que no se votaba de la manera en la que se sufragó este año. ¿Por qué? Porque estaba vigente la Ley de Voto Rogado, que cercenaba el derecho al sufragio de los españoles y españoles residentes en el exterior. Reclamamos mucho en contra de esa norma. Cuando Sánchez asume la presidencia de España, nuestra demanda fue escuchada y el año pasado derogaron la Ley de Voto Rogado. Como se sabe, después de las últimas votaciones autonómicas, Sánchez decidió someter su gestión a la voluntad del pueblo y convocó a elecciones de manera adelantada. Así que todas las agrupaciones salimos a correr y la verdad es que subió mucho el nivel de participación. Antes de la Ley de Voto Rogado, por ejemplo, cuando elegimos a (José Luis Rodríguez) Zapatero, llegamos a tener el mismo nivel de convocatoria de votantes que España, alrededor del 40%. Después, con el Voto Rogado, la participación de los españoles residentes en la Argentina bajó al 2 o 3%: fue un suicidio. Ahora repuntamos al 10% del padrón.
- ¿Quién ganó entre los votantes de la Argentina?
- Sabemos que el PSOE logró un buen porcentaje, pero el voto se computa no por país, sino como el conjunto del extranjero. Estamos pidiendo los datos argentinos, pero aún no los tenemos. Yo, por ejemplo, soy gallega, entonces, mi voto se cuenta en esa región autónoma, Galicia. No hay un representante de los extranjeros en el Parlamento.
- ¿Cuántos españoles residen en el país?
- El padrón indica que hay alrededor de 400.000. Es un número que crecerá con la llamada Ley de Nietos o LMD. Nosotros veníamos militando y solicitando esa norma desde hacía muchos años hasta que por fin logramos los dos tercios de las cámaras. La LMD es amplia porque reconoce que la Guerra Civil fue un delito y, a partir de eso, otorga en el artículo 8 el derecho a la nacionalidad a nietos y bisnietos de españoles y españolas, sin distinción de género. Si los consulados se ponen a trabajar y a otorgar nacionalidades por esta ley, es posible que aproximadamente otros 300.000 argentinos puedan obtener la nacionalidad.
- ¿Cómo están actuando los consulados para alcanzar ese objetivo?
- En la Argentina tenemos cinco: Ciudad de Buenos Aires, Bahía Blanca, Mendoza, Córdoba y Rosario. El más grande es el de Buenos Aires por la cantidad de españoles concentrados en su jurisdicción: en segundo lugar está Córdoba (abarca, además, las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán, Catamarca, La Rioja y Santiago del Estero). Los consulados representan al Estado español en esos lugares y son los que tienen la potestad para otorgar la nacionalidad. Desde que salió el instructivo (reglamentación) de la Ley de Memoria Democrática, empezamos a trabajar para que los consulados lo aplicaran y lo que vimos es que hay criterios diferentes según la oficina que a cada quien le toque. Estuvimos muy atentos a los comentarios que recibimos sobre la marcha de estos trámites. En febrero habíamos tenido una reunión virtual con el cónsul de Córdoba, Martínez del Barrio. Y el 26 de septiembre viajé para hacer una visita presencial.
- ¿Cuál fue el resultado de esa reunión?
- Nos recibieron y pudimos conversar. El cónsul es encantador, pero, más allá de su persona, necesitamos que la LMD por la que tanto luchamos se aplique. Todos los consulados pasaron por el mismo problema de que les habilitaron nuevas plazas de trabajadores después de que se aprobó la norma. De a poco eso se fue acomodando. Pero, en el caso de Córdoba, seguíamos recibiendo reclamos y por eso nos parecía que había llegado el momento de hacer un viaje presencial en el que estuve con el cónsul, y, también, conocí a algunos de los que nos venían trasladando su angustia y preocupación por las demoras en los trámites. Por otro lado me encontré con el dirigente del gremio de los trabajadores del Estado español en el exterior, que me dijo que sus colegas se sienten muy presionados y estresados por el volumen de trámites. Están haciendo un esfuerzo enorme, pero no coincido con el criterio del cónsul de recibir, recibir y recibir trámites, y de no expedir nacionalidades. Córdoba prácticamente no otorgó ninguna con la Ley de Memoria Democrática, salvo las contadas con los dedos de la mano por situaciones excepcionales de salud y de emergencia porque puede haber una penalidad. Pero la mayoría de las peticiones están trabadas y demoradas.
- ¿Por qué razón?
- Porque el personal está saturado, y él (el cónsul) tiene la estrategia de recibir las solicitudes de nacionalidad: como no recibió aún los refuerzos que pidió, no está haciendo inscripciones.
- ¿El Consulado de Córdoba está funcionando como una receptoría de papeles?
- Más o menos: no lo plantearía en esos términos alarmistas. La ley fija un plazo de dos años para tramitar la nacionalidad, que vencerá en octubre de 2024. Queda un año por delante, con la posibilidad de extenderlo durante un año o dos más. Entonces, lo primero que quiero hacer es transmitir tranquilidad. Lo importante en este momento es ingresar el trámite y tener un número de expediente porque, a partir de eso, ya no importa que los plazos expiren. Hoy existe un método bastante artesanal que obliga a enviar la documentación por correo electrónico: una vez que el Consulado chequea que están todos los papeles, emite una credencial con un número que permite acceder a un sistema de turnos que, también, es bastante precario. Una vez que dan el turno, se presentan los documentos en el Consulado y, con eso, ya empieza a correr el trámite. El tema es que queda ahí. Conozco a alguien que recibió la credencial N° 40 y todavía no tiene la inscripción.
- ¿Qué está ocurriendo en los otros consulados?
- Los demás consulados ya emitieron nacionalidades. El de Buenos Aires tiene más de 30.000 solicitudes procesadas y más de 10.000 emitidas. Claro que en ese Consulado hay otra impronta y actividad. Lo que me plantearon los trabajadores de Córdoba es que ellos ya venían con un retraso grande como consecuencia de la pandemia. Es decir, estaban con problemas cuando se aprobó la Ley de Memoria Democrática.
- ¿Cuántas solicitudes de nacionalidad tiene Córdoba?
- Aprobadas con credencial, 7.000. Y más de 9.000 recibidas por e-mail en proceso de cotejo.
- ¿Qué cantidad de personal se ocupa de esta tarea?
- Hay 11 o 12 empleados. Se sumaron cuatro contratados con la Ley de Memoria Democrática, pero, según él (el cónsul), no dan abasto. Creo que el reclamo del Consulado de Córdoba es válido, pero Mendoza ya emitió muchas nacionalidades y allá, ninguna. Es una forma de organizar el trabajo que debe ser revisada porque una cosa es que seas lento y otra que no saques ninguna nacionalidad.
- ¿Qué puede hacer usted para cambiar esta situación?
- Haré un informe político para las autoridades del partido, que hoy gobierna España. Mi referente es Pilar Cancela, secretaria de PSOE Exterior, que actualmente se desempeña como secretaria de Estado de Cooperación Internacional. Ella trabajó mucho por la Ley de Memoria Democrática y sabía de mi viaje a Córdoba. Entiendo que hay preocupación por esto. A mí me inquieta la angustia de quienes tienen expectativas de acceder a la nacionalidad española: a ellos les digo que inicien el trámite y que no abandonen la lucha. Esto no es sencillo ni inmediato en términos generales: lleva un tiempo lógico. Ahora bien, no puede pasar que no haya novedades después de un año de la entrega presencial de los papeles. Quiero transmitir otra vez que estamos observando lo que ocurre en este Consulado puntual y que lo vamos a informar.