El servicio de transporte público de pasajeros logró superar en estos días un nuevo conflicto, a partir de la intermediación del Gobierno provincial entre empresarios y trabajadores. Y luego de las tensiones recientes por los reclamos salariales, ahora la expectativa se centra en la semana que viene.
Tanto la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) como la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) tienen agendado el viernes 6 de octubre, que es cuando vence el plazo para el depósito de los sueldos correspondientes a septiembre.
Y ambas partes permanecen atentas a las comunicaciones del Gobierno nacional respecto a las compensaciones tarifarias que se giran al interior a través del Ministerio de Transporte.
La preocupación radica en que, sin estos aportes federales, crecen las posibilidades de que resurjan las discrepancias por el pago de haberes en este sector, como había sucedido en el último mes.
En la mañana del lunes, el gremio de UTA reiteró el quite de colaboración que había llevado adelante a modo de protesta por la demora en el depósito del bono de $ 60.000 y de actualizaciones salariales acordadas con los empresarios.
Tras una reunión con el vicegobernador, Osvaldo Jaldo, en la que el Estado provincial garantizó el anticipo de subsidios asignados al sector, finalmente se logró superar este conflicto entre empresarios y trabajadores.
De todos modos, en Aetat insisten con las críticas por la “inequidad” en el reparto de los recursos nacionales para el transporte, ya que, según los datos aportados por los prestadores del servicio, el 90% de los fondos son asignados al área metropolitana de Buenos Aires, mientras el 10% son enviados a las provincias del interior.
“Una sociedad estatal”
El presidente del Concejo Deliberante de la Capital, Fernando Juri (PJ), insistió con su propuesta para avanzar con la creación de “una sociedad anónima estatal que optimice y administre” el servicio de transporte público de pasajeros en la provincia. “Si no es mi proyecto, que sea otro, pero el actual sistema es anacrónico y obsoleto; si no se lo cambia, esta situación va a continuar por años”, indicó el dirigente peronista a “Buen Día”, el matutino de LG Play.
Juri, que fue reelecto en la banca y podría continuar al frente del cuerpo vecinal en la próxima composición, mencionó a modo de ejemplo los regímenes implementados en Salta y en Mendoza, entre otros distritos del país donde existe participación estatal en el ámbito del transporte público.
“De hecho, la Provincia y la Nación ponen fondos (en la actualidad), por lo que ya hay una suerte de intervención estatal. Por lo tanto, creo que es fundamental realizar el cambio. Es un sistema que ya no funciona. Y esto lo vengo diciendo hace tres años”, añadió.
Además, se mostró confiado en que el gobernador electo, Osvaldo Jaldo, y la intendenta electa, Rossana Chahla, junto a los ediles, podrán “ponerse de acuerdo” para avanzar con este tema, con la participación de usuarios, de trabajadores y de empresarios.
“Jaldo manifestó su posición de tomar el transporte público como una política de estado. A eso se suma la sintonía entre municipio, provincia y Concejo Deliberante; tengo la gran expectativa de que esto tiene que cambiar”, insistió Juri.
Asimetrías
El legislador de Libres del Sur, Federico Masso, visitó el barrio Victoria, donde se refirió a la crisis en el transporte. “Es fundamental que el Gobierno nacional termine con la asimetría en la distribución de subsidios al transporte. No es justo que solo el 16% llegue a las provincias mientras que el 84% se quede en Buenos Aires y CABA. Necesitamos un verdadero federalismo, donde Tucumán reciba lo que le corresponde y protejamos los empleos”, indicó el candidato a diputado nacional.
El dirigente opositor expresó que, tras el último conflicto, se logró “una solución temporal, atento a que el vicegobernador Osvaldo Jaldo adelantó dinero destinado al boleto estudiantil para zanjar las diferencias”. “Pero esto me lleva a una reflexión honesta: Tucumán necesita empresarios comprometidos, empresarios que vean el transporte como un servicio esencial y no como una oportunidad para aprovecharse de la necesidad de la gente y sus empleados”, indicó.
Masso consideró además “preocupante” que “algunos empresarios, que en 2002 apenas tenían unos pocos colectivos, ahora dominan el sector y están sentados en las mesas de negociación”. “Necesitamos que el Estado ejerza un fuerte control sobre este servicio, para garantizar que se priorice el bienestar de los tucumanos y no solo las ganancias de unos pocos”, sostuvo.