Aprender más para luchar y para movilizarse, intercambiar ideas y colaborar con pares, y, sobre todo, empoderarse para generar el cambio. Con esos objetivos, son cada vez más los eventos alrededor del globo que reúnen a jóvenes que luchan por el planeta. Y con esos mismos ideales, en los próximos días se llevará a cabo en Chile el Primer Foro Latinoamericano de Jóvenes por el Clima: una reunión para intercambiar experiencias y para presentar proyectos (de la mano de científicos) y alternativas para enfrentarnos al cambio climático.

Y, por supuesto, Tucumán estará presente. Mauricio Ariel Castro Andrés fue elegido para representar a la provincia en esta jornada inédita. Se trata de una propuesta organizada por Global Youth Climate Pact (GYCP), un proyecto de investigación y acción global que da a estudiantes de secundaria formación y herramientas para jóvenes interesados en el calentamiento global. La propuesta del foro es la de compartir y la de discutir los desafíos del futuro para el desarrollo de la vida en el planeta. Organizado por la Pontificia Universidad Católica de Chile, se llevará a cabo este miércoles y contará con la presencia de expertos de todo el mundo y funcionarios el presidente del senado chileno Juan Antonio Coloma y la senadora ambientalista Isabel Allende.

“GYCP es una organización global que tiene un aspecto más científico. Es un proyecto internacional, surgido e Francia, que trata de reunir proyectos ambientales en todo el mundo para luchar contra el cambio climático. La idea es unir la parte académica con la juventud ambientalista y generar propuestas novedosas”, cuenta a LA GACETA Mauricio, que estudia Abogacía en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). Él conoció GYCP en su adolescencia, en su Jujuy natal. “A los 17, para una feria de ciencias, nos reunimos un grupo de chicos preocupados por el cambio climático. Ahí comenzamos a redactar un proyecto para aplicar en GYCP. Antes de eso, Argentina no participaba. Con el tiempo empezamos a ampliar la investigación, algunos chicos nos vinimos a Tucumán a estudiar, y hoy estamos recabando datos en ambas provincias, con la idea de crear un registro nacional sobre huella de carbono”, comenta.

Datos

El proyecto del que habla, ese que empezó en la secundaria y ese mismo que hoy GYCP respalda (de hecho, viaja a Chile para exponerlo a sus compañeros ambientalistas) es un estudio sobre medición de huella de carbono, que empezaron en San Pedro (Jujuy). “Fue por sugerencia mía. Había ido a un congreso en el que hicieron mucho hincapié sobre la huella de carbono. Entonces cuando volví, lo hablé con mis compañeros y nos apareció la curiosidad; comenzamos a investigar y con el tiempo hasta creamos una aplicación que permite conocer cuál es tu huella. En Jujuy, el resultado nos dice que cada persona tiene que plantar 19 árboles para contrarrestar su huella”, ejemplifica.

La huella de carbono es una medida que se utiliza para evaluar la cantidad total de gases de efecto invernadero que cada individuo, evento u organización crea durante un periodo de tiempo. Conocerla crea consciencia y responsabilidad, y permite generar medidas para abordar las problemáticas actuales, basados en datos empíricos. “Lo que nosotros buscamos es concientizar sobre la importancia de conocer la huella de carbono, que es algo importantísimo y que no se tiene mucho en cuenta. [...] Tener todos estos datos que hemos ido recabando nos permite tener una base para ver qué acciones podemos tomar y ver si realmente estamos contribuyendo o no a mitigar el cambio climático. Hay diferentes aristas para combatirlo; está la acción, la concientización y la investigación. Nosotros (desde GYCP) hacemos la última, porque todo lo que se propone necesita un fundamento científico. Por eso son necesarios estos encuentros; nosotros esperamos que la Global (así nombra al organismo) pueda tener su sede en Argentina, y que quizá podamos tener más incentivo del estado y más apoyo científico para seguir investigando”.