WASHINGTON.- Con el mundo en camino de batir el récord del año más caluroso de la historia, autoridades, líderes empresariales, celebridades y activistas se han reunido en el centro de Manhattan para la Semana del Clima y la Cumbre de Acción Climática de la Naciones Unidas, buscando atraer la atención a la crisis ambiental.
La Cumbre sobre Acción Climática, convocada por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, busca que los gobiernos, las autoridades comerciales, financieras y locales y la sociedad civil aceleren la toma de medidas, y puedan escuchar de los primeros líderes y emprendedores y su compromiso con el objetivo mundial de acelerar el ritmo y la escala de una transición justa hacia una economía mundial resiliente al clima basada en energía renovable más equitativa, según explica el organismo multilateral.
A lo largo del día, la ONU espera anuncios de aumento de la ambición y que los compromisos expresados incluyan, además, objetivos sectoriales, en ámbitos como el carbón, el metano, los combustibles fósiles o los sumideros de carbono, entre otros aspectos.
La reunión anual sobre el clima coincide con el inicio de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que reúne a jefes de Estado y altos funcionarios de gobiernos con líderes del sector privado para centrarse en el cambio climático y calentamiento global, en un año marcado por un número récord de desastres, incluidas ocho graves inundaciones y temperaturas casi incompatibles con la vida en varios lugares del planeta.
El evento principal tendrá lugar mañana, cuando Guterres abra la Cumbre de Acción Climática, un encuentro de alto perfil destinado a revertir el retroceso en los objetivos del acuerdo climático de París y alentar a los gobiernos a adoptar nuevas medidas para combatir el cambio climático.
Ese mismo día se abrirá el proceso de firma del Tratado de Alta Mar, que los 193 Estados de la ONU alcanzaron el 19 de junio. Se trata de un histórico acuerdo, al que se ha llegado después de casi dos décadas de trabajo, y que buscará un enfoque común para proteger al menos el 30 por ciento de la superficie de los océanos, fuera de las aguas jurisdiccionales de los países, de aquí a 2030.
“Existen dudas persistentes de que... podamos alcanzar nuestros objetivos climáticos. Hay demasiados retrocesos, por lo que esperamos que esta cumbre pueda usarse como un momento para inspirar a la gente”, dijo Selwin Hart, asesor especial sobre clima del secretario general, en una entrevista.
Hasta ayer, la ONU no había anunciado qué líderes o funcionarios obtendrían uno de los codiciados espacios para hablar en la cumbre sobre el clima.
Autoridades de más de 100 países le han dicho a Guterres que quieren hablar, pero su equipo ha estado descartando las solicitudes en los últimos días, dando prioridad a los países que planean nuevas acciones.
Para Guterres, que lleva años reclamando una mayor ambición climática, es importante que los cerca de 200 países expresen su ambición, demuestren su credibilidad para llevar alcanzar los objetivos así como su capacidad de implantación de las medidas pertinentes.
Hart dijo que la asignación de espacios para hablar no tenía como objetivo avergonzar a ningún líder o país, sino mostrar quienes son los primeros “que están haciendo cosas”.
El encuentro se produce 10 semanas antes de la cumbre climática COP28 en Emiratos Árabes Unidos y es una de las últimas reuniones de alto perfil destinadas a lograr que los países presenten nuevas acciones y planes para alejarse de los combustibles fósiles.
También es una cita clave después de que los encuentros de los grupos G7, G20 y de las naciones Brics -Brasil, China, Sudáfrica, India y Rusia- no lograran que los líderes aceptaran eliminar gradualmente los combustibles fósiles.
La Alianza de Pequeños Estados Insulares, de casi 40 miembros, utilizará la Semana del Clima como plataforma para pedir a los líderes de los países desarrollados que tomen medidas más contundentes para poner fin al uso de combustibles fósiles y apoyar el aumento global de las energías renovables como la eólica, geotérmica y solar.
Otro de los aspectos que se analizará mañana es el fondo del mecanismo de pérdidas y daños, que se acordó en la COP26 (Cumbre del Clima de Glasglow) en un contexto en el que para la ONU será un indicador de éxito conocer la movilización de distintos flujos financieros hacia sectores bajos en emisiones y hacia sectores resilientes.
En el ámbito de la credibilidad, el encuentro quiere medir el grado de coherencia tanto de la financiación como del resto de compromisos climáticos. Estas y otras cuestiones permitirán facilitar y aunar mensajes de cara a lograr que la próxima cumbre del Clima, la COP28 que se celebrará en Dubai, sea un éxito y que las recomendaciones que salgan de esa cita, que se celebrará a final de año, sean una prerrogativa importante sobre la senda a seguir.
Durante el evento, que tiene lugar en la semana de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, tendrá lugar la apertura de firma del Tratado de Biodiversidad de Alta Mar. (Reuters-Especial)