Tras haber llegado al máximo de 12,4% la inflación de agosto, impulsada por la devaluación del tipo de cambio oficial y otros factores, los pronósticos de los economistas para lo que resta del año no son muy optimistas. Entre las consultoras privadas se prevé que la inflación acumule 163% a lo largo del año y algunos proyectan un número aún más cercano al 200%.

Los analistas ya calculan que el índice de precios mensual del último cuatrimestre del año se mantendrá en las dos cifras, dada la incertidumbre política y la posibilidad de un levantamiento del cepo cambiario que genere una nueva depreciación del peso.

María Castiglioni, de C&T Asesores Económicos, consideró que  “uno de los problemas de septiembre es el arrastre estadístico, que va a aportar por lo menos cinco puntos, por la aceleración que hubo sobre todo en la segunda mitad de agosto. En estos días de septiembre ya notamos que los precios siguen aumentando. Entonces, para este mes estimamos un número similar o incluso algo mayor a agosto”.

Para el próximo mes, la economista dijo en TN que le es difícil pensar en que pueda haber una desaceleración de la inflación. Estimó que podría perforar el 10% si el Gobierno tiene éxito con los congelamientos de prepagas y transporte, así como en su estrategia de mantener el precio del dólar oficial y sostener la calma en los paralelos.

En tanto, Matías De Luca, economista de LCG, apuntó: “Aproximadamente un 36% del índice de precios al consumidor está bajo programas de precios (con tope de aumento y/o congelamiento), por lo que la dinámica inflacionaria está bastante supeditada al cumplimiento del acuerdo por parte de los participantes”. Para el analista, esos acuerdos, aun cuando se cumplan, significan “puntos extras de inflación reprimida que en algún momento se notarán”.

¿Nueva devaluación a corto plazo?

Gabriel Caamaño, socio de Consultora Ledesma, pronosticó que luego de las elecciones -ya sea de las generales de octubre o del eventual balotaje de noviembre- habrá una devaluación similar a la de agosto y que no se realizará una unificación cambiaria antes de fin de año.

En ese escenario, calculó que la inflación promedio mensual del último cuatrimestre de 2023 estará entre 11% y 11,5%, para redondear el año con un alza de entre 175% y 180% en los precios.

Castiglioni también hizo referencia a la dinámica cambiaria y al efecto de las últimas medidas que tomó el Gobierno. “Para adelante lo vemos muy difícil, tanto por la dinámica de los dólares, como por la inyección de pesos que está por hacer el Gobierno con los anuncios de bonos y la fuerte suba del piso de Ganancias. Esto implica más déficit y se va a financiar con emisión monetaria”, afirmó.

En LCG estiman que la inflación cerrará 2023 en torno al 190%, especialmente teniendo en cuenta una posible corrección cambiaria. De Luca explicó que los precios del dólar futuro y los bonos ligados a la cotización del tipo de cambio oficial ya prevén otra depreciación del peso.