La Asociación Empresaria Argentina (AEA), entidad que agrupa a los accionistas y directivos de las empresas más importantes de las empresas más grandes y poderosas del país, emitió ayer un comunicado en fuerte tono crítico que resalta como título, “El sector privado es clave para el desarrollo”. “Los empresarios miembros de la AEA comparten con la sociedad este documento que expresa la convicción central de la entidad: el desarrollo económico y social de la Argentina depende de que puedan movilizarse plenamente las potencialidades y energías del sector privado.

Subrayan que para lograr el desarrollo del país es imprescindible “el pleno respeto a las instituciones de la República consagradas en nuestra Constitución” y “la extraordinaria relevancia del principio constitucional de la división de poderes, de contar con una Justicia independiente, así como de garantizar la libertad de expresión”.

Además, los empresarios condenaron que la Argentina viva “desde hace largos años con el flagelo de la alta inflación, con déficit permanentes en las cuentas públicas, con la ausencia de una moneda respetada, con una muy elevada y distorsionada presión tributaria sobre el sector formal, con varios tipos de cambio, con injerencias indebidas en el ámbito propio de las empresas como son los controles de precios, o las múltiples restricciones vinculadas al comercio exterior; por solo nombrar algunas anomalías”.

Entre los párrafos más enfáticos, el comunicado de la AEA resalta sus reclamos: “son las empresas las que, a pesar de los altibajos de la economía, han invertido en el país durante décadas. Son las empresas las principales generadoras de empleo para los argentinos. Son las empresas las que producen bienes y servicios que abastecen el mercado interno y exportan al resto del mundo, generando divisas para el país. Son las empresas las que, junto con los ciudadanos, con sus impuestos, sostienen el funcionamiento del Estado. Sin empresas no hay país”.

Finalmente, los empresarios insisten en que para que la Argentina crezca es imprescindible generar las condiciones que estimulen la inversión por parte del sector privado. “Es fundamental estabilizar la economía y equilibrar las cuentas públicas”. Para ello, señalan que hay que lograr una macroeconomía estable y previsible; erradicar la inflación y generar políticas macroeconómicas apropiadas para mantener bajas las tasas de inflación. Y recomiendan iniciar un nuevo ciclo de desarrollo con el “respeto y fortalecimiento de las instituciones de la República”, “reducir la muy elevada presión tributaria”, y “crear y preservar empleos formales”, entre los más relevantes.