En una entrevista exclusiva con "Panorama Tucumano", el programa insignia de LG Play, el director de la Escuela Técnica N°1, Claudio Fernández, compartió sus preocupaciones sobre la creciente ola de amenazas de bomba que está afectando a la comunidad educativa, y cómo está impactando tanto a alumnos como a docentes.

"Estoy angustiado", admitió Fernández al comenzar la conversación. La serie de amenazas de bomba que afectó a su escuela ha causado un gran malestar. "La educación es una salida", afirmó con convicción, expresando su frustración ante la interrupción constante de las clases debido a estas acciones innobles.

"Siento que con estas amenazas, acciones innobles, se vulneran los derechos", enfatizó Fernández. Subrayó que tanto los derechos de los alumnos a recibir una educación de calidad como los derechos de los docentes a enseñar y trabajar en un ambiente seguro están siendo perjudicados.

"Si se trata de una broma, es de mal gusto", declaró. Fernández lamentó que estas situaciones estén afectando negativamente la educación de una generación entera. "Estamos cercenando la educación a una generación, no les permitimos adquirir conocimientos", expresó con pesar.

Fernández habló sobre el desafío de formar a los alumnos para un mundo en constante cambio. "A los alumnos hay que formarlos para el trabajo que aún no existe. Es un desafío que hay que hacerlo. Vamos 10 años atrás", comentó, señalando la importancia de la adaptación y la innovación. Y en ese sentido resaltó que estas amenazas generan un gran daño. "No puedo formar a mis alumnos. Tengo que interrumpir un derecho, un derecho que tanto costó", dijo con frustración. Explicó cómo las amenazas de bomba han obligado a la escuela a cerrar temporalmente y cambiar a la educación virtual, lo que afecta la calidad de la enseñanza y la interacción entre compañeros.

Claudio Fernández no pudo ocultar su angustia por esta situación DIEGO ARÁOZ.

"¿Y qué pasa con el pibe que no tiene acceso a la virtualidad?", cuestionó, poniendo de relieve las desigualdades que estas interrupciones pueden agravar.

Haciendo un llamado a las familias, Fernández enfatizó: "Las familias tienen que escuchar a los pibes". Instó a los padres y madres a estar atentos a las inquietudes y necesidades de sus hijos, especialmente en estos tiempos difíciles.

Respecto a la disciplina, Fernández explicó su enfoque: "Yo no estoy de acuerdo con el castigo. En mi escuela no hay castigo. La escuela tiene que contener". Subrayó la importancia de brindar un ambiente de apoyo y comprensión para los estudiantes.

Concluyendo la entrevista, Fernández abordó la conexión entre la escuela y los conflictos sociales. "Si bien estamos atravesando esta locura, todos los conflictos sociales explotan en la escuela", advirtió. Dirigiéndose a los padres, concluyó con un mensaje esperanzador: "Mamás, papás, sigan creyendo en las escuelas, sigan creyendo que serán lugares seguros para sus niños".