“Robo en banda” es el delito que se cometió en diferentes provincias del país y que puso en alerta a las autoridades del área de Seguridad de la provincia y no tiene nada que ver con los saqueos registrados en los últimos años.

“La diferencia radica es que son personas que se están organizando para atacar a determinados comercios para obtener artículos que, precisamente, no es comida”, aseguró el jefe de Policía Julio Fernández.

El funcionario informó que desde hace varios días vienen trabajando con los jefes de la Policía Federal, Gendarmería Nacional y Policía de Seguridad Aeroportuaria. “Ellos, por el momento, nos están brindando información sobre las modalidades detectadas en otros puntos del país. En base a ese trabajo, estamos realizando los planes de prevención”, aseguró Fernández.

Las fuerzas federales dieron a conocer un informe teniendo en cuenta los casos registrados en diferentes provincias. Algunos de los detalles de esos trabajos son:

- Son grupos de no más de 20 personas que se agrupan en barrios de la periferia de las grandes urbes.

- Las edades de los detenidos hasta el momento oscilan entre los 13 y 25 años.

- Normalmente se movilizan en motocicletas.

- Los blancos elegidos son comercios de venta de bebidas alcohólicas, celulares, electrodomésticos, prendas de vestir y zapatillas.

- Muchos de ellos portan armas de fuego.

- Varios crearon grupos de WhatsApp para mantenerse comunicados e informarse sobre posibles blancos y presencia policial en la zona.

“En base a la información que hemos recibido se planificó todo un trabajo de prevención que estamos aplicando”, aseguró Fernández.

Diciembre de 2013 es una fecha que quedó grabada en los capítulos más negros de la historia de nuestra provincia. En esos días, hordas de personas salieron a la calle para saquear todo lo que estuviera a su alcance. Pero se aprovecharon de una huelga policial que dejó desamparada a las calles de la provincia.

El contexto actual es completamente diferente. En esta oportunidad la crisis social es mucho más grave y las autoridades de la provincia así lo entienden. Por ese motivo, los tres poderes del Estado decidieron apoyar a la fuerza. 

El Ministerio Público Fiscal le dio herramientas a la Policía para poder actuar en el marco de la ley. El Ejecutivo, en tanto, inició las conversaciones para que los integrantes de la fuerza tengan un incremento salarial cuanto antes.