CIUDAD DE MÉXICO.- La desaparición y posible asesinato de cinco jóvenes en el estado de Jalisco, en México, causó conmoción por el nivel de crueldad con el que se sospecha que actuaron los criminales. Las víctimas son cinco amigos de la infancia: Roberto Carlos Olmeda Cuellar, Jaime Adolfo Martínez Miranda, Diego Lara Santoyo, Uriel Galván González y Dante Cedillo Hernández, todos de entre 20 y 22 años. Las autoridades investigan si el brutal crimen está vinculado a una pelea territorial entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Según indicó la Justicia, circularon en las redes dos videos en los que se ve primero a los jóvenes amordazados. El segundo generó aún más escalofríos: en la grabación se ve cómo obligan a uno a pegarle en la cabeza con una piedra a otro hasta matarlo y luego lo fuerzan a decapitarlo con un cuchillo. En la grabación se ve a tres cuerpos amarrados y tirados en el piso, al parecer ya sin vida.

El viernes 11 de agosto se encontraron para ir juntos a una feria de la localidad de Lagos de Moreno. Fueron vistos por última vez a la noche en el Mirador de Santa Cruz, un lugar al que iban a pasar el rato y hacer deporte desde chicos, a menos de 5 kilómetros de la feria. Fue el último lugar en el que los vieron con vida. Habían quedado en encontrarse con otro amigo, que fue quien dio la voz de alerta al no encontrarlos. El martes, encontraron un auto calcinado con restos humanos y se analizan para saber si pertenecen a los chicos.

El fiscal Luis Joaquín Méndez Ruiz precisó que aún no se puede confirmar a cuantos cuerpos corresponden los restos y si pertenecen a los jóvenes.

Tras consultar con los padres de las víctimas, la fiscal especial en desaparición de personas, Blanca Trujillo, informó que hay “altas posibilidades” de que las personas que se veían en los videos sean sus hijos. (Reuters-Especial)