Un ejemplo del ejercicio ciudadano se dio en la escuela Crisóstomo Méndez, de Banda del Río Salí. Alrededor de las 10.30, llegó Carmen Vega, de 71 años, que a pesar de sus dificultades para caminar no se dejó pasar la ocasión de sufragar.
"Tuve dengue y también covid; eso me liquidó -dijo-, pero estoy acá lo mismo", agregó mientras esperaba a su hija María sentada en una silla y se apoyaba sobre su andador. "Por suerte no tuve ningún problema para votar, apenas llegué me dejaron pasar al cuarto oscuro así que me desocupé dentro de todo rápido, demasiado a diferencia de junio", agregó.
El traslado junto a su hija
La señora dijo que intenta participar en todas las jornadas electorales. "Alguna que otra vez no fui, pero era por cuestiones de fuerza mayor. Ahora me parecía importante, para ver si mejoramos un poco como país", precisó.
Luego, su hija María emitió su voto y volvió hacia su madre para llevarla a casa. Con ayuda de otra persona que estaba llegando a la institución, subió a Carmen a la motocicleta y se marcharon. De ese modo, comenzó la votación en la Escuela Técnica N°1 de Lastenia.