Por Bruno Farano
23 Julio 2023
SONRISAS. En pleno centro porteño, Pierce y Acosta arriban con muy buen ánimo al hotal de la concentración. LA GACETA / FOTO DE BRUNO FARANO (ENVIADO ESPECIAL).
“Cambiamos el chip. Nos enfocamos en la recta final del torneo y en el objetivo que se trazó este grupo desde el primer día”. Mateo Acosta lleva poco tiempo en La Ciudadela, pero ya piensa como un “santo” más. Sabe que, tras la eliminación de la Copa Argentina, San Martín no puede fallar más.
En últimos días, tras el regreso desde Córdoba, el grupo habló mucho. Hubo autocrítica y los futbolistas se juramentaron dejar atrás los tropezones para afrontar las últimas 13 fechas.
Almagro aparece como la primera “final”. Y en Bolívar y Pellegrini tienen claro que para consagrarse primeros de la zona A no alcanzará sólo con mantener una localía fuerte; es indispensable comenzar a sumar lejos de casa. “Hay que meter una seguidilla de victorias. Es lo único que nos va a permitir alcanzar la cima primero, y afianzarnos después”, explica Darío Sand en la sala de embarque del aeropuerto “Benjamín Matienzo”. “Es cuestión de hacer las cosas que sabemos y que ya demostramos que podemos lograr”, agrega el arquero, quien volverá a ser titular luego de haber visto desde el banco el duelo por la Copa con Racing.
Todo suma para lograr el objetivo; más en un fútbol en el que las cábalas (o “costumbres”, como prefieren decirle algunos) están a la orden del día.
Un poco por casualidad, aunque también con el objetivo de seducir a la diosa fortuna, en esta ocasión San Martín armó su búnker a 650 metros del hotel en el que se había concentrado la mayor cantidad de veces que visitó la Ciudad Autónoma de Buenos Aires esta temporada.
El Feir’s Park Hotel está sujeto a remodelaciones, por lo que no podía cumplir algunos requisitos que solicitaba el cuerpo técnico. La segunda opción era el Grandview Hotel, donde el equipo se había alojado cuando enfrentó a CADU, a Flandria y a Temperley (todas derrotas); por lo que un dirigente decidió desecharlo.
Cuando el Hotel Dorá apareció en escena, el mismo dirigente le dio el okey de buenas a primeras. ¿El motivo? Ese había sido el campamento elegido por el equipo que venía haciendo una campaña histórica, cuando la AFA decidió volver a foja cero el campeonato de ascenso por culpa de la pandemia en 2020.
Pero hay más. En ese hotel también viene concentrándose, cuando visita Buenos Aires, Agropecuario, actual líder de la zona A. “Vamos ahí”, dijeron en Bolívar y Pellegrini. Creer o reventar.
El fútbol
Pablo Frontini decidió volver a las bases. Esta tarde, en el estadio “Tres de Febrero”, pondrá en cancha al mismo equipo que en la última jornada, contra San Telmo, cortó la racha de dos partidos sin victorias (hasta acá la peor performance desde que el DT tomó el timón del equipo).
“Me parece que en la Primera Nacional, con los equipos que se cierran más atrás, Emanuel Dening se siente más cómodo con un compañero de área”, había apuntado el entrenador. Así, Acosta tendrá una nueva oportunidad para potenciar su nivel. “El poco rodaje que tuve en Chile me está pasando factura”, dijo el punta. “Estoy desesperado, quiero hacer un gol lo antes posible”, sentenció, esperanado con que hoy pueda cortar la malaria y aportar para un triunfo clave.
SIEMPRE A LA CABEZA. Dening fue el primero que marchó para embarcar. LA GACETA / FOTO DE BRUNO FARANO (ENVIADO ESPECIAL).
Con el líder Agropecuario ya en el horizonte -jugarán en La Ciuaddela el domingo 30-, el duelo de esta tarde es crucial. El “santo” debe ganar para llegar con todo a un partido que puede permitirle pegar el añorado sorpasso. Por eso el equipo se juramentó acelerar con todo tras la eliminación de la Copa. Mientras tanto, la CD decidió apelar a esos detalles extrafutbolísticos que nunca vienen mal cuando de inflar la moral se trata.
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más popular
