Ante la proximidad de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), el oficialismo acelera su campaña con un precandidato -Sergio Massa- que participa de actos, inaugura obras, se reúne con dirigentes y se muestra escoltado por los principales referentes de Unión por la Patria (UP). Además, el espacio busca opacar la interna que deberá sortear Massa contra Juan Grabois.
En este escenario, la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, tiene un rol protagónico y en las últimas jornadas se ha mostrado, en tres oportunidades, muy cercana al ministro de Economía.
En el acto que se realizó el lunes para celebrar los 15 años de la estatización de Aerolíneas Argentinas, Massa no solo estuvo acompañado por la presidenta del Senado si no, hizo una férrea defensa de la aerolínea de bandera y optó por confrontar con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
“Escuchaba por radio a un candidato a presidente de la oposición, actual jefe de Gobierno porteño, decir que los vecinos del conurbano que compran leche le pagan el pasaje Roma a unos cuantos. Pido, por lo menos, ser serios con los números”, planteó el aspirante a suceder a Alberto Fernández.
Por su parte, Fernández de Kirchner mantuvo la línea discursiva y sostuvo: “Alguien debería inventar algún simulador de presidentes, urgentemente, donde lo pusiéramos a uno con los números y problemas de la Argentina, no de Suiza, Suecia o Noruega. Muchos simulamos en la Argentina como que la inflación, el FMI o la deuda son fenómenos de la naturaleza. Los han provocado, los han traído”.
¿Figura que suma?
Consultados por LA GACETA, referentes del peronismo tucumano destacaron la participación de la vicepresidenta en la campaña porque representa a uno de los sectores fundantes de UP, pero además es una figura “convocante” a partir de su experiencia en el Poder Ejecutivo.
Para el Jefe Regional de Enohsa en el norte, Gerónimo Vargas Aignasse, la participación activa de la vicepresidenta en la campaña es la representación genuina de la unidad que buscó el peronismo en el armado de las listas. “Hay una diferencia con 2019, cuando Cristina Fernández expuso al candidato. La fórmula Massa-Rossi es una fórmula de consenso en la que intervinieron gobernadores, dirigentes y organizaciones sociales que componen nuestro espacio. Por esto, entiendo que tanto la vicepresidenta, como cualquier otro dirigente nuestro es muy importante para la tracción de votos”, aseguró.
En este sentido, el dirigente tucumano remarcó que el apoyo de Fernández de Kirchner a Massa “le aporta experiencia y le acerca un segmento importante de argentinos que la apoyan a ella y a su espacio”.
Y postuló que hoy en día no hay un dirigente que “tenga la potestad de conducir o contribuir mayoritariamente para garantizar el triunfo”. “Acá es la unidad, una gran unidad, de todos los que componen este gran frente. Y en eso hay dirigentes que son muy relevantes, obviamente como Cristina”, enfatizó.
Fidelizar el voto
Desde su perspectiva, la diputada nacional Mabel Carrizo celebró que la vicepresidenta se muestre “protagonista y comprometida” con el espacio y la unidad. La representante de la provincia en el Congreso precisó que Cristina Fernández aporta la certeza que “necesitan los argentinos de que sus derechos van a ser defendidos y de que tendrán un gobierno de cara a la sociedad con políticas de estado que garanticen el desarrollo económico personal con crecimiento industrial y redistribución de la riqueza”.
Finalmente, Carrizo también destacó que la cercanía entre el precandidato y la exmandataria pretende “fidelizar” el voto de quienes adhieren a las políticas que “se han llevado adelante en sus gobiernos y para que los ciudadanos sepan que lo más importante es la Argentina”.
Piso y techo
El analista político Carlos Fara indicó que la conducta de la vicepresidenta puede resultar un arma de doble filo para el precandidato presidencial y titular del Palacio de Hacienda porque el intento de “asegurar el piso de los votantes fieles” garantiza un caudal de votos, pero también los limita.
“Su respaldo no es para obtener votos independientes o recuperar votos decepcionados de 2019 y es también una señal a la tropa propia respecto de que el ministro de Economía es él elegido y de que ella juega en ese sector. Por otro lado remarca que ella es la líder principal del espacio porque es la que tiene más capital político”, señaló Fara.
El consultor insistió que el apoyo a la principal fórmula oficialista garantiza el “encolumnamiento político del núcleo ideológico cristinista no peronista” y eso determina “un piso y un techo”
Sobre las limitantes que genera el apoyo de la presidenta del Senado, Fara consideró que esto genera en el binomio conformado por dos ministros del Ejecutivo la responsabilidad de ganar por amplia diferencia sobre Juan Grabois.
“Massa no tiene problemas en mostrarse como el amplio favorito dentro de la interna y desde este punto de partida entiendo que la diferencia tiene que ser importante porque si no generará dudas respecto de la solidez de Massa”.