En un evento trascendental para la industria energética, personal de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) y de la Secretaría de Innovación y Desarrollo Tecnológico de la provincia (Sidetec) presentaron los resultados del estudio “Estado de situación y potencial de producción de biogás en la provincia de Tucumán”.
El estudio detalla el estado actual y el potencial de producción de biogás en nuestra provincia, generando nuevas oportunidades para su desarrollo.
El acto se llevó a cabo en la sede de la Eeaoc. Contó con la presencia del ministro de Desarrollo Productivo de la provincia, Álvaro Simón Padrós; del secretario de Innovación y Desarrollo Tecnológico, Roberto Tagashira, y del director Técnico de la Eeaoc, Daniel Ploper. Congregó, además, a destacados profesionales y autoridades, interesados en la producción de biogás como una alternativa energética prometedora.
El estudio había sido solicitado por las autoridades de la Sidetec, y fue realizado por un grupo de expertos del proyecto Estudios Ambientales de la Eeaoc, a cargo de Eugenio Quaia. Este dio a conocer los resultados obtenidos, y analizó las implicaciones y las oportunidades que esta investigación brinda para el crecimiento sostenible de la provincia.
El grupo de técnicos que trabajó en el estudio está conformado por Daniel Machado, por Federico Molina, por Fernanda Acuña, por Luis Coria y por Matías Nuñez.
Estado de situación
El objetivo principal de la investigación fue analizar el estado de situación y el marco legal, en los ámbitos internacional, nacional y provincial, en relación a la producción de biogás. Además, se investigaron las principales tecnologías de biodigestión utilizadas en el mundo y se identificaron los diferentes tipos de biomasas disponibles en Tucumán para la generación de biocombustible con fines energéticos. Asimismo, se estimó el potencial para su aprovechamiento térmico.
“Más allá de las buenas perspectivas que nos presenta la utilización del combustible de Vaca Muerta, en Tucumán tenemos la voluntad de avanzar en la transición energética desde los combustibles fósiles hacia nuevas formas de energía”, indicó Tagashira. “Una de esas formas es la utilización de fuentes de energía que no comprometen el ambiente o que lo hacen de la manera más controlada posible. En ese sentido, hemos identificado el biogás producido en biodigestores como una forma de energía renovable, propia y utilizable en distintos ambientes y necesidades”, añadió el funcionario.
“Desde la Eeaoc hicimos un relevamiento importante y llegamos a la conclusión de que en Tucumán, mediante la utilización de los derivados de agroindustrias, de residuos sólidos urbanos y de biolíquidos cloacales, se pueden generar más de 200 millones de m³ anuales de biogás. Eso equivale a 130 millones de m³ de gas natural. El biogás es un biocombustible en estado gaseoso que se obtiene por una transformación que hacen microorganismos en un ambiente anaeróbico; es decir sin oxígeno, de materia orgánica. Es un gas combustible que está compuesto en un 65% de gas metano y un 35% de dióxido de carbono”, indicó Quaia, responsable del estudio.
“Tiene un poder calorífico inferior que el gas natural y se está usando en todo el mundo. En Alemania hay más de 10.000 plantas produciendo biogás. El problema de Europa es que recibe el gas natural de Rusia y con el conflicto que tienen ahora, se les está haciendo cada vez más difícil”, indicó.