Acevedo deslizó que podría revisarse el contenido del llamado “Pacto Social”
Le costó admitir su papel protagónico en la generación de la herramienta legal denominada “Pacto para el saneamiento y paz social” -conocida comúnmente como “pacto social”-, pero finalmente terminó por reconocer que tuvo una gran participación en darle forma a los lineamientos bajados por el entonces gobernador José Alperovich.
Ahora, a dos décadas de la implementación de ese instrumento, el ministro del Interior, Miguel Acevedo, considera que es momento de revisar el pacto. “Si como Gobierno provincial asistimos (a municipios y comunas) primordialmente con el pago de los salarios; luego, con los gastos de funcionamiento, y luego avanzamos sobre las obras, entonces ya estamos resolviendo todo. Hay que darle otra vuelta de tuerca. A lo largo de muchos años hemos logrado la paz social; ahora hay que ver y readecuar, para que podamos ir optimizando. Porque, si no, se mezclan los roles”, señaló.
Dijo esto durante una entrevista que concedió al periodista Federico van Mameren, para el ciclo “Panorama Tucumano”, la nave insignia de LGPlay. Y si bien precisó que solo daba su opinión, no es menor el hecho de que se trata del vicegobernador electo, quien desde el 1 de noviembre pasará a ser la segunda autoridad en la provincia.
Defendió la necesidad histórica de tal herramienta. “En aquel momento los municipios estaban literalmente incendiados. Entonces comenzó el pacto, con el cual garantizábamos los sueldos; porque se venía de dos y hasta de tres meses de atraso. Primero garantizábamos el pago de sueldos hasta la categoría 18; luego se llegó a la 20; después, a la 24 -es decir, solo quedaban sin cobrar funcionarios y concejales-. Y finalmente se avanzó hasta cubrir toda la planilla salarial”, contó.
Destacó que la metodología dio buen resultado; y subrayó que se la manejó con responsabilidad. “Eso se reflejó en estas elecciones: en cada una de las jurisdicciones del interior ganó el oficialismo de esa jurisdicción; en todas. Eso habla de una buena gestión”, indicó Acevedo.
Recursos
En otro momento de la entrevista, el ministro del Interior justificó el actual presupuesto de la Legislatura, ámbito que presidirá cuando asuma como nueva autoridad provincial. El plan de gastos de ese poder del Estado asciende a unos $ 34.000 millones; cifra que lo ubica como uno de los más altos entre las provincias de la Argentina y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. “Lo tendremos que ver; y hay que ver por qué se dice que es el más grande del país. Si tiene fondos asignados y la posibilidad de ayudar, ¿por qué no? Es probable que (el destino social de una parte de los recursos responda a) una decisión netamente política; pero si beneficia a jubilados y a estudiantes bienvenidos sea. Lo que es bueno se mantiene, y lo que haya que modificar (se cambiará)”, respondió, ante la consulta de Van Mameren, acerca de si revisaría ese presupuesto.
“El boleto pago para los estudiantes es algo bueno; porque hay que ver el contexto. Debido a la pandemia, muchos chicos habían dejado de asistir a la escuela. Había que recuperar la matrícula; y un modo de hacerlo fue con el boleto estudiantil. Como también lo fue el pago del seguro, que se hizo desde el Poder Ejecutivo”, puntualizó Acevedo.
Incluso, el ministro no cuestionó la ayuda que muchos legisladores destinan a organizaciones intermedias. Y cuando Van Mameren le señaló la posibilidad de que mediante ese artilugio se desvíen fondos hacia otros destinos respondió: “cada acto administrativo que se hace desde la Legislatura tiene la intervención del Tribunal de Cuentas”.
No descartó que durante su gestión al frente de la Legislatura se sancionen normas que hacen a la transparencia, como una Ley de Acceso a la Información Pública. “Todos los temas son tratables. En la Legislatura hay 49 voluntades, hay que dar el debate; y debatamos todo lo positivo, y consensuemos. Yo siempre trabajo sobre las coincidencias”, dijo.
Precisamente a partir de esa última definición, descartó una tensa convivencia con el futuro gobernador, Osvaldo Jaldo. “Siempre he sido de consensuar. Puede haber algún choque, pero será en alguna situación especial, y para acomodar las cosas. Yo quiero trabajar por el bien de los tucumanos”, expresó.
Finalmente, admitió que a la provincia nada le sobra en cuanto a finanzas. “En mucho aspectos, somos ‘Nación dependientes’. Para hacer obras de envergadura, por ejemplo. Con los salarios la venimos llevando bien. Pero esto es como en la casa: uno anda ajustadito, porque la cosa no está fácil. Hay que ir manejando con cautela y con prudencia los fondos”, resaltó.