Ciro y los Persas y la Orquesta Juvenil de la UNT, los vientos y las cuerdas saludan al rock

El sonido contundente de Ciro y los Persas se unirá a los instrumentos clásicos de la Orquesta Juvenil de la UNT, que dirige Gustavo Guersman, para un concierto que se anticipa como inolvidable. Será hoy a las 22 en el Club Central Córdoba (avenida Alem 790). La banda que lidera Andrés Ciro Martínez tocará junto a la formación los temas de su disco “Sueños” y -a continuación- la banda de rock sola hará alrededor de 30 canciones más.

“Ellos vienen tocando con grupos orquestales más reducidos. Esta es una orquesta grande, que tiene 53 integrantes y para este espectáculo van a ser 64. Hemos tenido que invitar gente para algunos instrumentos que pedía la partitura -explicó Guersman-. Por ejemplo, la tuba, un par de trombones y más percusión. Hace un mes y medio me preguntaron sobre la posibilidad de hacer este concierto. Cuando me mandaron la partitura, para ver qué tipo de material era, qué estética tenía y si se adaptaba a nuestra orquesta, comprobé que todo estaba muy bien, que los arreglos (de Joaquín Guevara y Juan Cucchiarelli) eran muy buenos y que además fue grabado en un álbum que está en Spotify con la Filarmónica de Mendoza. Entonces comenzamos a ensayar, a la vez que ensayábamos el concierto con música de Pink Floyd que dimos la semana pasada en la apertura del Julio Cultural (junto a The Worms y al Coro Universitario, en el Teatro Alberdi), y ya estamos listos”.

Al momento de esta charla con LA GACETA, Guersman esperaba la llegada de Ciro y Los Persas, en la tarde de ayer, porque la banda venía desde Jujuy e iban a tener un único ensayo general.

“Son distintos lenguajes, para nosotros, que hacemos el 90% de música clásica. Una vez al año tocamos algo distinto, que tenga que ver con lo popular -agregó el director-. Ya habíamos hecho jazz, folclore, experiencias con Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale, con Fito Páez, hace muchos años, con Franco Luciani, Juan Falú, etcétera. Y ahora, tan en simultáneo, estar trabajando para un espectáculo de rock sinfónico inglés, como el de Pink Floyd, y con esto del rock nacional. Es interesante como experiencia con lenguajes distintos y muy definidos en sus orígenes, hasta geográficamente”.

- ¿Cuáles son los desafíos para la orquesta?

- Para este tipo de presentaciones no convencionales, uno de los desafíos es armar bien el rompecabezas y que todas las piezas estén funcionando bien. Yo tengo que garantizar que todo lo atinente a la orquesta esté funcionando como tiene que ser y, después, unir todo. Para eso estamos los directores, para ver cómo conectamos todas las partes con un grupo que viene un día antes y con el que vamos a tener un solo ensayo. El otro desafío es el sonido. Por muy bueno que sea todo lo que hagamos, uno de los protagonistas fundamentales es el sonido, que permite que las cosas puedan tener una calidad tímbrica. Para los chicos de la Juvenil, poder hacer una experiencia de rock actual es muy movilizante, porque ellos lo conocen más a Ciro que yo, que me tengo que poner a estudiarlo.

- ¿Cómo salió el homenaje a Pink Floyd?

- Fue una experiencia muy fuerte. Todo ha funcionado muy bien, con una producción local, visual y musicalmente, y el público lo ha recibido con una emoción que me sorprendió. Ha sido muy movilizante para mucha gente. Se ve que para muchos esa música ha sido parte de su vida. Quedó gente sin poder ingresar a la sala. Veremos si hay posibilidad de repetirlo más adelante si hay algún huequito en la agenda.

- Hubo experiencias de fusión sinfónica y popular muy singulares, como la de Los Palmeras, en Santa Fe.

- Sí. Eso tuvo un impacto muy masivo. Pero hubo algunas cuestiones polémicas porque había letras de algunas canciones que no eran coherentes con los criterios sobre aquello que hoy se trata de evitar. Tengo entendido que en Mendoza se levantaron las mujeres de la orquesta y se negaron a tocar. Es lo que a veces pasa con mucha música, como por ejemplo el reguetón, que son expresiones del pueblo pero uno se pregunta si no terminan siendo una apología de ciertas cosas que no son correctas y que a veces los medios de comunicación difunden a pesar de que las letras hablan de violencia de género y otras cosas. En nuestro caso, por lo menos, tratamos de apuntar a interpretar músicas que nos mejoren como sociedad. En el caso de Pink Floyd, era un homenaje al disco “El lado oscuro de la luna”, que es conceptual, con historias de la vida, como la alegría, el dinero, el tiempo, la vejez, la muerte... En cuanto a Los Palmeras, sí creo que sus letras tienen una cierta calidad, los arreglos son muy buenos, pero así como hay muchas cosas populares de calidad y jerarquía, hay otras que no. Y desgraciadamente son las que más venden. Son manejadas libremente por la industria.

- Es curioso que ese “desfasaje” con los estándares actuales de algunas obras provenientes de épocas en que el machismo era aceptado, puede verse en óperas como “Pagliacci”.

- Sí. Como sucede en la física, cuando uno tironea tanto para un lado empiezan a aparecer los otros lados, hasta que se encuentra un punto de equilibrio. Hay óperas maravillosas que no las vamos a cancelar o cambiar porque hoy no son políticamente correctas algunas cosas. Hay que ponerse en la situación de la época. A mí sí me preocupa un poco la responsabilidad de quienes difunden todas estas expresiones artísticas de cómo arrastran a buena parte de la juventud, en forma masificada, a cantar, a comprar o a consumir cosas que no solamente no tienen calidad musical sino que están expresando textualmente una contradicción con respecto a los tiempos que corren.

- ¿Cuáles son los próximos proyectos de la orquesta?

- Estamos preparando para septiembre un próximo concierto de música clásica, donde va el Concierto para Violín de Félix Mendelssohn con Marianna Kazakova como solista y una sinfonía de Wolfgang Amadeus Mozart con Lucía Valessi como directora invitada. También vamos a hacer un concierto de Georg Philipp Telemann con un joven solista de viola, que acaba de entrar a la Orquesta Sinfónica de la UNT por concurso. Se va a hacer la Quinta Sinfonía de Ludwig Van Beethoven y varias cosas más.