Pasar un archivo del celular a la computadora no parece ser una misión muy complicada para quien maneje este tipo de dispositivos. Sin embargo, esta sencilla acción requiere muchas veces de cables que no tienen las mismas fichas o incompatibilidades de sistemas operativos. Por eso, es importante a la hora de adquirir un producto de tecnología conocer cuál es el ecosistema que ofrece para sus usuarios.
El ecosistema de una marca está conformado no sólo por los equipos que están disponibles para su comercialización, sino también de la interconexión que ofrecen y cuán fluida puede ser la sincronización de los datos que se tienen en uno u otro dispositivo. Por ejemplo, un buen ecosistema permite transferir o sincronizar las fotos del celular a una tableta o computadora casi de manera automática. Además permite que se puedan compartir los contactos, las agendas, los sistemas de correo electrónico y hasta las contraseñas. De esta manera, podemos cambiar de equipo pero sin perder los datos esenciales que necesitamos todos los días.
En los últimos años, los ecosistemas han avanzado de tal manera que hoy podemos trabajar en una notebook y utilizar una tableta como segunda pantalla, manejar el celular con el teclado de la computadora, o recibir en nuestro reloj digital las alertas configuradas en el teléfono. Esta coreografía de datos y acciones es posible gracias a la integración de equipos que ofrecen determinadas marcas, la cual desconocemos muchas veces y puede ser un valor muy importante a la hora de comprar un nuevo dispositivo. Por ejemplo, si ya tenemos un celular de una marca, ¿conviene comprar una tableta de la competencia o bien podemos apostar a integrar ambos equipos para buscar una mayor fluidez de trabajo?
La semana pasada Samsung presentó las nuevas notebooks que comenzará a vender en Argentina, las Galaxy Book3, en diferentes versiones y precios. Todas estas computadoras pasarán a completar el ecosistema de la marca surcoreana con un elemento que aún no se comercializaba en el país y que resulta fundamental para el trabajo de oficina, para el diseño o bien para videojuegos. De esta manera, Samsung se vuelve mucho más atractiva como marca para pensar un ecosistema, luego de años en los que posicionó otros productos tales como teléfonos, tabletas, auriculares y relojes inteligentes. Concretamente, se pueden pasar fotos del celular a la computadora utilizando el mouse de esta última, se pueden atender llamadas telefónicas en cualquier equipo conectado al teléfono o bien, podemos tener los mismos contactos en cualquier de los productos mencionados. Además se puede aprovechar la aplicación Quick Share de la compañía, una aplicación que permite compartir contenido instantáneamente a cinco dispositivos a la vez que estén cercanos.
Con esta apuesta Samsung puede por fin comenzar a competir con el ecosistema de Apple, marca que ideó hace mucho tiempo las conexiones entre el iPhone, el iPad, el MacBook, el Apple Watch, los AirPods y el Apple TV. Desde hace tiempo, todos estos dispositivos pueden conectarse entre sí para ofrecer una experiencia integral al usuario. De hecho, Apple no concibe sus productos de manera separada, sino justamente en vistas a su ecosistema y en cómo cada uno, con sus particularidades, le puede dar valor al consumidor. Apple también cuenta con su sistema AirDrop, una tecnología que sirve para compartir archivos, documentos, fotografías y videos entre dispositivos de la misma marca, sin necesidad de cables o aplicaciones de terceros. Finalmente, otra ventaja que tiene este ecosistema es la posibilidad de localizar todos los dispositivos que tengas asociados a tu Apple ID y de esa forma saber dónde está cada uno de ellos.
Tener en cuenta el ecosistema puede ayudar a decidir no solo por la marca del equipo que vas a adquirir. Se trata principalmente de considerar la experiencia del usuario con cada opción y también de cuánto te va a costar completar dicho ecosistema. Es mirar a largo plazo una adquisición y reconocer que hoy no trabajamos solamente con un solo equipo a lo largo del día. La calidad y el diseño son aspectos indiscutibles, pero a largo plazo un ecosistema bien integrado, puede ser un diferencial más que importante.