Un tablao flamenco para festejar un cumpleaños especial

Un tablao flamenco para festejar un cumpleaños especial

El Ballet Español llega a los 10 años de actividad con un estreno en el teatro San Martín, producido y dirigido por Carlos Rivero. Despedida.

A partir de las 20, el escenario del teatro San Martín (avenida Sarmiento 601) se transformará en un tablao flamenco con “Suspiros de España”, un musical con 50 bailarinas del estudio coreográfico del Ballet Español y una banda con músicos en vivo integrada por Allier Díaz Ferrer a la guitarra, Lisandro Aramayo al cante y percusión, y las palmas de Luz Mansilla y María Emilia Jerez.

“Es un espectáculo musical de 90 minutos que recrea la gracia y la pureza ibérica. En el escenario reina la fuerza arrolladora del baile flamenco, la exquisitez y alegría de la danza y música española, en una propuesta que seguro emocionará y será inolvidable”, describe su autor, Carlos Rivero, creador del grupo que cumple 10 años.

“Suspiros de España” se estructura en tres cuadros. “El primero, Capricho Español, es una amalgama que fluye a través de diversos movimientos grupales, solos y pasos a dos, donde toman un gran protagonismo la castañuela, la bata de cola y la fuerza interpretativa de la música clásico-española de Manuel de Falla y de Rimski-Kórsavok”, explica el coreógrafo.

El segundo, “Goyescas”, es una creación de Rivero donde se muestra la esencia de la escuela bolera tradicional que surge en España en el siglo XVIII como fruto de la combinación de bailes populares andaluces con danzas académicas. “Tal como lo dice su nombre, las bailarinas, aparte de tener un gran dominio técnico de la danza universal (condimento fundamental para este estilo de baile), con sus movimientos trazan las obras que el pintor español Francisco de Goya plasmaba sobre sus lienzos”. describe.

El tercero, “Tiempo flamenco”, “es un ritual sensual lleno de energía, porque el flamenco cautiva, contagia, energiza y emociona a través de sus ‘palos jondos y festeros’ junto a los músicos”, destaca.

El bailarín participa en el primer cuadro, “realizando un solo de danza estilizada (disciplina de danza española con música sinfónica de compositores nacionalistas). Luego, en el último, interpreto junto a los músicos y el ballet diversos números -explica-. Entre ellos, el baile con el que gané la Beca Completa de Formación en Madrid ‘Cantiñas’, un ‘palo’ muy alegre y festero proveniente de Cádiz que surge de la conjunción de las Alegrías (y sus diversos estilos), Mirabrás ‘el pregón’, Romeras y el final por Bulerías”.

Se verán batas de cola y mantones de Manila entre el colorido vestuario creado por López de Santos, empresa española dedicada al diseño y confección de vestuario para flamenco. Oli Alonso hace su aporte al despliegue escénográfico en el diseño lumínico.

“Esta función será el inicio de mi despedida del país, que continuará en teatros y tablaos de Buenos Aires, Córdoba y San Juan, porque a partir de septiembre integraré el Cuerpo de baile del Ballet Flamenco de Madrid”, sorprende Rivero con la noticia, que es a la vez motivo de orgullo y de tristeza para alumnos y seguidores.

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