La especialidad de Matías Rojas, en el inicio de la segunda etapa, tranquilizó las aguas en el “Cilindro de Avellaneda”, le entregó aire a Racing y le marcó el camino para confirmar su llegada a octavos de final de la Copa Libertadores como el mejor equipo del grupo A.
La “academia” no vive un presente tranquilo. Su andar irregular en la Liga Profesional había establecido como crucial el duelo contra Ñublense. Para colmo, el 0-0 del final del primer tiempo, sumado a que a esa altura Flamengo ya goleaba 3-0 en Río a Janeiro a Aucas y desplazaba a Racing del primer lugar de la zona, había transformado el estadio en una verdadera olla a presión.
El “movete Racing, movete” con el que el público despidió a los dirigidos por Fernando Gago al término de la primera mitad, se hizo más intenso y feroz cuando los jugadores retornaron al campo para jugar el segundo tiempo.
Pero Rojas, quien anoche disputó su último partido en Avellaneda (seguirá su carrera en Corinthians de Brasil) sacó a relucir lo mejor de su repertorio.
El paraguayo le sacó lustre a su botín zurdo y acomodó un tiro libre desde la izquierda (por afuera de la barrera) junto al ángulo inferior derecho del arquero Nicola Pérez, quien pese a un gran esfuerzo no logró sacar la pelota.
El 1-0 cambió la energía que había en el estadio; y transformó a Racing. Poco importaba que justo en ese momento Flamengo marcaba el 4-0 en su estadio.
La victoria en casa le permitía a Racing asegurar el primer puesto; así, los hinchas se olvidaron de los cuestionamientos, comenzaron a celebrar y el equipo se soltó.
Cuatro minutos más tarde del gol del ex Defensa y Justicia, una buena transición ofensiva derivó en un control orientado de Maximiliano Romero, quien giró y metió un estiletazo para Gabriel Hauche, que definió con solvencia para asegurar el resultado.
Tanto se soltó la “academia”, que el 3-0 llegó a los 26’ del complemento gracias a Aníbal Moreno; y cuando se terminaba el duelo, Gonzalo Piovi decoró el resultado.
Hasta el gol de Rojas, la “academia” había sido un manojo de nervios. Pero su gol desactivó la “bomba”, dejó de lado las críticas y armó la fiesta en Avellaneda. Racing no falló: ganó, goleó, gustó, recuperó la sonrisa y llega a octavos siendo el mejor de su grupo.
En tanto, en Ecuador, Independiente del Valle derrotó 3 a 2 a Argentinos y le arrebató el primer lugar del grupo E. El “bicho” había puesto el 2-2 a tres minutos del final, pero se desconcentró y lo perdió en el minuto 90. De esa manera, llega a octavos de final siendo escolta.
Estudiantes deberá jugar los 16avos. de final
El 4-0 sobre Oriente Petrolero no le alcanzó al “pincha” para llegar al primer lugar del grupo C (Bragantino vapuleó 7-1 a Tacuary y se quedó con ese puesto). Así, el “pincha” deberá conformarse con jugar los 16avos. de final de la Copa Sudamericana. En tanto, Huracán perdió 2-0 en Paraguay con Guaraní y quedó eliminado. Hoy a las 19, Newell’s (ya aseguró el primer lugar del grupo E) recibirá a Audax Italiano. Mientras que a las 21, Defensa y Justicia jugará en su casa con Millonarios para tratar de terminar como el mejor del grupo F. El “Halcón” alcanzará ese objetivo con solo empatar.