La Agremiación Tucumana de Educadores Provinciales (ATEP) anunció un paro en las escuelas para el próximo jueves, al que se adhirieron también otros gremios docentes de la provincia. La medida responde a la convocatoria lanzada por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) en repudio a las acciones de represión denunciadas en Jujuy.
En los últimos días, comunidades originarias y organizaciones sociales -la mayoría de ellos, docentes- fueron avasallados por fuerzas de seguridad locales durante una concentración. Los manifestantes se pronunciaban contra la recientemente aprobada reforma parcial de la Constitución de Jujuy, en la que se contempla sancionar y restringir los cortes de ruta y de calles.
“Nos adherimos al paro convocado para el jueves 22 porque es lamentable lo que pasó. La represión fue brutal, y la reforma constitucional que lleva adelante (el gobernador Gerardo) Morales afecta los derechos de toda la sociedad”, dijo a LA GACETA Hugo Brito, secretario general de ATEP.
El docente aseguró que la normativa que se prevé agregar a la Carta Magna local “impide la libre expresión de una de las formas de protesta que tiene el pueblo trabajador”, y repitió sus lamentos hacia sus colegas jujeños.
Asimismo, confirmaron la medida de fuerza la Agremiación del Personal de Enseñanza Media y Superior (Apemys), la Unión Docentes Tucumanos (UDT), Docentes Autoconvocados y el Sindicato Docente de Tucumán (Sidot).
En tanto, algunos de ellos decidieron reforzar el apoyo a la comunidad jujeña a través de otras expresiones. Además del paro, Docentes Autoconvocados llevará a cabo ese día una movilización en plaza Independencia, a las 11 de la mañana.
También se expresará de esta manera Sidot, aunque su secretario general, Carlos Giménez, compartió que se está analizando la posibilidad de que un grupo docente marche camino a Jujuy. “Queremos acompañar la grave situación que están atravesando. No tenemos algo institucional organizado, pero queremos ir hasta el corte que haya para apoyarlos”, indicó.
Por otro lado, la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Tucumán (Adiunt) se unirá al reclamo pero a partir de una convocatoria demandada por la Conadu Histórica.
Además, realizaron una movilización “en repudio a la represión que llevó adelante el gobierno jujeño contra las comunidades originarias”, aseguró Ariel Osatinsky, secretario general.
El reclamo salarial
Además, otro punto que intentaba visibilizar la agrupación manifestante fue la disconformidad salarial, que hacía semanas venían reclamando. En este sentido, el referente de ATEP lo comparó con la situación de los docentes tucumanos.
“El salario docente en Jujuy es diferente al de Tucumán, pero el sueldo a nivel nacional es bastante precario”, señaló Brito. Y remarcó que durante el año deben mantener diferentes reuniones con las autoridades provinciales para tratar los aumentos.
En detalle, mencionó que el sector docente percibió dos aumentos este año. “Los últimos fueron dos de 8%, y en julio tenemos otra mesa de negociación salarial”, indicó el docente.
Los educadores -explicó- perciben como sueldo inicial un monto de $135.000, que este mes pasaría a $145.000, y en julio, a $165.000. “Tuvimos algunas variaciones en lo que pactamos en las paritarias de febrero; por ejemplo, en mayo nos dieron un bono de $20.000 que no estaba contemplado”, sostuvo.
De todos modos, Brito resaltó que por la situación económica del país “los aumentos que se consiguen, al día siguiente pierden valor”. “No hay aumento que alcance, y esto afecta a muchos de los docentes y de los trabajadores. A nivel país se repite en todas las provincias y hasta que no se solucione continuaremos luchando”, agregó.
En este marco, el salario “ideal” que según ATEP debería percibir un docente tucumano es de alrededor de $250.000. “Es a lo que aspiramos, pero en ninguna provincia se está dando este salario. Queremos conseguir, mínimamente, una mayor franja que la que tenemos”, subrayó el educador.
Así, informó que está agendada para julio la reunión paritaria en la que se revisarán los índices de inflación y se intentará llegar a un nuevo acuerdo salarial.