19 Junio 2023
Foto: Furniture at Work
Los años de pandemia no llegaron solos. La necesidad necesidad de utilizar sistemas mixtos entre la virtualidad y la presencialidad nos obligó a incorporar nuevos hábitos de vida, entre los que destaca el home office. Es por eso que una compañía mostró cómo se verán los cuerpos de los trabajadores remotos en 80 años.
Espalda jorobadas, manos deformadas como garras, ojos hinchados y problemas de salud mental son algunas de las características que acompañarán a los trabajadores remotos del futuro según un estudio, en tanto no acondicionan sus espacios laborales y no incorporen rutinas sanas y de descanso en medio de la jornada de trabajo.
Los rasgos de los trabajadores remotos del 2100
En primer lugar y, tal vez, entre las consecuencias más obvias del trabajo a distancia, está el encorvamiento de la columna vertebral. Esto se debe a la falta de mobiliario que favorezca la postura de la espalda y afecta directamente a la columna. Trabajar con una computadora en un nivel inferior al de los ojos obliga a los trabajadores a inclinar la cabeza hacia abajo.
Foto: Furniture at Work
También a raíz del uso de pantallas las personas del 2100 que trabajen a distancia tendrán unos ojos oscuros e hinchados. Esto sería producto de la exposición a luces de las pantallas durante un tiempo prolongado sin tomar los descansos o las protecciones necesarias como lentes para luz azul.
La parte del cuerpo que quizás más trabaja durante el home office son las manos que no se verán excluidas de estas afecciones. Debido al continuo uso del mouse o del teclado, las manos tendrían forma de garras, adaptándose a la forma que toman durante las extensas horas de trabajo en computadora.
Foto: Furniture at Work
Cómo se ve el modelo 3D de los trabajadores remotos del futuro
Furniture at Work es la empresa que desarrolló el modelo 3D, al que llamó Anna, a partir de los estudios de la Universidad de Leeds del Reino Unido. Además, la compañía resaltó "posibles problemas de salud mental" como la ansiedad y la depresión y un sistema inmunológico debilitado por la falta de aire fresco.
Un estilo de vida sedentario, que va en consonancia con el trabajo remoto, también incidiría en el organismo produciendo un aumento considerable de peso.
Foto: Furniture at Work
Por eso los especialistas recomiendan tomar ciertas precauciones como la "regla 20-20-20" qué consiste en trabajar 20 minutos y luego observar algún objeto a 20 pies de distancia (6 metros aproximadamente) durante 20 segundos. Otra de las recomendaciones fue acondicionar los espacios de trabajo con muebles ergonómicos y destinar un espacio particular para establecer límites entre el trabajo y el tiempo personal.
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