La Organización de la Naciones Unidas (ONU) declaró el 2023 como el “Año Internacional del Mijo” debido a su gran impacto dentro de la alimentación mundial en relación a tres ejes: seguridad alimentaria, producción sustentable y nuevas oportunidades de mercado sostenibles, tanto para productores como para consumidores.
El mijo es un cultivo que pertenece al género Panicum, de la familia de las gramíneas. Crece durante la época de verano, y tiene una alta resistencia a los cambios bruscos de temperatura.
Argentina es uno los principales exportadores de mijo de toda América. La calidad y el producto final hacen que sea demandado en grandes cantidades por países de todo el mundo.
La mayor concentración de este cereal se localiza en las provincias de Misiones, Chaco, Formosa, Corrientes, Entre RIos, Santa Fe y Buenos Aires. En el período 2020-2021, se produjeron 9.500 toneladas y otras 9.400 toneladas en la campaña 2022-2023. La producción puede destinarse a la producción de semilla, de forraje y como cultivo de servicio.
Los principales destinos de comercialización de mijo son Brasil, Canadá, países de Europa y Asia como la India, Austria, Suiza, República Dominicana y Chile, entre otros.
Propiedades del mijo
Este cereal, muy consumido en Asia y África y que carece de gluten, ha sido redescubierto en el mundo a la cocina sana. Es uno de los granos más ricos en hierro (60 gramos cubren el 41% de las necesidades diarias) y en magnesio (29%), por eso se recomienda en casos de debilidad física o psíquica.
Es uno de los cereales más energéticos (41 gramos de hidratos de carbono en 60 gramos), con una cantidad moderada de proteínas (seis gramos) y pocas grasas (dos gramos). Su contenido en vitaminas B1, B2 y B9 triplica las del resto de cereales por lo que es un cereal muy apropiado para regenerar el sistema nervioso y para las mujeres durante el embarazo y la lactancia.
Beneficios del mijo para la salud
- Como cereal excepcionalmente rico en hierro, el mijo se recomienda en casos de debilidad física, fatiga, anemia, astenia, falta de ánimo y menstruaciones abundantes. Resulta también muy útil para mujeres embarazadas o en periodos de lactancia.
- Favorece la regeneración celular y por tanto se considera excelente para fortalecer la salud de la piel, los cabellos, las uñas y los dientes.
- Por su alto contenido en magnesio es un cereal muy apropiado para los deportistas, que con el sudor pierden muchos minerales. Además de combatir el agotamiento y permitir la recuperación tras el esfuerzo físico, alivia los calambres musculares y fortalece los músculos.
- El mijo resulta igualmente eficaz para defenderse del estrés y la irritabilidad nerviosa, para reducir la intensidad y frecuencia de los ataques de migraña, y como apoyo en regímenes adelgazantes.
- Se encuentra, además, entre los pocos cereales sin gluten, lo que resulta interesante para las personas celíacas.
¿Cómo se debe consumir el mijo?
El mijo puede constituir una interesante alternativa de arroz o a la pasta de trigo. En África, se elaboran con él diferentes panes y galletas nutritivas, así como determinadas bebidas alcoholicas.
Al ser un cereal muy energético es idóneo para el desayuno o para integrarlo en la dieta previa a una jornada deportiva o una salida de excursión. Tiene un sabor suave y da grandes resultados junto con ingredientes de sabor más fuerte o intenso.
Se puede incluir en ensaladas variadas, pero también combina bien con legumbres (mijo con lentejas al horno o mijo con garbanzos), con soja en sus distintas formas (tofu, tempe, miso), y con verduras y hortalizas, sobre todo las dulces (budín de mijo con zanahoria y jengibre; ñoquis de mijo con col lombarda; mijo y coliflor gratinados).
En un buen ingrediente de pizzas y hamburguesas vegetales, de cremas y sopas de verduras. Su textura crujiente captura bien los aromas de los ingredientes que lo acompañan y no cansa al paladar, pues su sabor no domina en el plato.