Los resultados obtenidos en la encuesta sobre la campaña de trigo 2022 en Tucumán, realizada por técnicos de la sección Economía de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), en lo referente al control químico de enfermedades muestran que en el 99% de la superficie no se realizaron aplicaciones de fungicidas, mientras que en el 1% restante (434 ha) se efectuó una sola aplicación. En cuanto a la fertilización solo en un 4% (974 ha) del área relevada se usó nitrógeno o nitrógeno y fósforo.
La encuesta cubrió un 45% de las 66.030 ha sembradas con trigo en Tucumán, obteniendo un rinde promedio ponderado de 0,68 toneladas por hectáreas (t/ha).
La densidad de siembra y distancia entre hileras elegida en el 39% de la superficie relevada fue entre 61-80 kilos por hectárea (kg/ha) y 25 cm, respectivamente. La siembra del cultivo sucedió mayoritariamente entre el 1 de mayo y el 15 de junio, fechas elegidas por la humedad en el perfil del suelo y disponibilidad de lote.
Los principales problemas de insectos fueron los pulgones y las arañuelas; y entre las malezas predominaron el cardo, la cebadilla y el cenizo. Se realizaron para su control principalmente una y dos aplicaciones, respectivamente. En cuanto a control de enfermedades, en el 99% del área no se realizaron aplicaciones de fungicidas. Y en el 96% de la superficie relevada no se fertilizó.