Joaquín Correa no está atravesando su mejor temporada desde lo físico, más allá de haber conquistado un nuevo título con Inter hace apenas un par de días. El tucumano se lesionó en una de las últimas jugadas de la final de la Copa Italia y encendió las alarmas de cara al choque decisivo con Manchester City en la Champions League.
El delantero argentino ingresó en el complemento del choque con Fiorentina, cuando la historia ya estaba 2-1 gracias al doblete de su compatriota Lautaro Martínez, y sufrió una molestia muscular antes de que se bajara el telón en el Olímpico de Roma.
De acuerdo a TyC, la dolencia no le impidió celebrar con el Nerazzurro el flamante trofeo, aunque después de la fiesta llegó el momento de ser examinado por el cuerpo médico y hacerse estudios. Los mismos constataron el grado de su lesión: padece una distensión en el sóleo de la pierna derecha.
Ante este problema, la presencia de Correa (se ausentó en diez partidos con Inter por una lesión en el muslo y otra en el tendón de la corva) en la final del 10 de junio con los Citizens es una verdadera incógnita. Trabajará a contrarreloj para poder decir presente en Estambul, aunque todo indica que llegaría muy con lo justo y Filippo Inzaghi deberá decidir si lo arriesga o no en una cita clave.