Se activó una nueva línea de investigación sobre el caso Madeleine McCann, la niña de tres años desaparecida en 2007 en Portugal. Desde ayer, policías de Portugal junto a sus pares alemanes y británicos realizan un intenso operativo de rastrillaje en un embalse frecuentado por el principal sospechoso del secuestro, Christian Brueckner.
El operativo sigue la pista de Brueckner, ya que sostienen que el alemán visitó con frecuencia la zona, ubicada a 45 minutos del balneario donde la niña fue vista por última vez. La hipótesis es que el sospechoso secuestró a Maddie, la asesinó y arrojó su cuerpo en ese lugar.
Los informes policiales recogen que los oficiales buscan "fragmentos de ropa" que puedan estar relacionados con la pequeña, entre los que destacan el pijama de color rosa que llevaba en el momento de su desaparición, según informa Daily Mail.
Quién es Christian Brueckner, el principal sospechoso del secuestro de Madeleine McCann
El alemán Brueckner de 45 años fue acusado por la fiscalía de su país por cinco delitos sexuales. Estas causas no están relacionadas con el caso Madeleine McCann, por el cual el hombre ya se encuentra hace rato detenido en Alemania.
Las acusaciones de la fiscalía se concretan sobre cinco casos ocurridos entre diciembre de 2000 y junio de 2017, en Portugal. Justamente el mismo país en el que la pequeña Maddie pasaba las vacaciones con sus padres en el apartamento de Praia da Luz, antes de desaparecer.
Además de las tres acusaciones de violación, hay otras dos por abusos sexuales en grado grave. En el primer caso, su víctima fue una irlandesa de 20 años, a la que asaltó y violó brutalmente al irrumpir enmascarado en su apartamento vacacional.
Otras de sus víctimas fue una niña alemana de diez años, a la que sorprendió mientras jugaba y obligó a presenciarlo mientras se masturbaba, pero que finalmente logró escapar.
Sus víctimas fueron niñas o mujeres de entre diez y 80 años, de casos hasta ahora desconocidos y algunos de ellos revelados a través de videos grabados por el propio sospechoso.
Brueckner, con un amplio historial de delitos por abusos sexuales y pederastia, cumple actualmente una condena de siete años de cárcel por la violación de una turista estadounidense de 72 años, cometido también en Portugal.