Un alumno secundario de la Escuela Superior de Educación Artística (ESEA) asistió a clases esta mañana con un arma de fuego cargada en su mochila. La situación fue detectada por sus compañeros, quienes alertaron a los docentes y a las autoridades del establecimiento escolar ubicado en España y Muñecas.
Personal de la Dirección de Distritos Urbanos recorría la zona e intervino de inmediato para resguardar la integridad física de todos los presentes en el lugar. Un equipo se apersonó rápidamente y luego llegaron refuerzos para colaborar en las tareas. Afortunadamente, no hubo víctimas ni heridos.
Según informaron las fuentes policiales, el arma es de calibre 22 y restan las pericias pertinentes para determinar si se encuentra operativa.
El segundo jefe de la Unidad Regional Capital, Juan Ibáñez, aseguró que se trata de “un hecho lamentable” y que “este chico que concurre a diario al establecimiento trajo dentro de su mochila un arma de fuego”.
La situación fue detectada por un compañero, que “le avisa al profesor inmediatamente, cuando descubre que era real la situación, llevó al alumno hasta la dirección de la escuela, tomó cartas en el asunto la directora y nos dio aviso a nosotros como institución policial para la debida intervención”.
Ibáñez informó que “se resguardó el arma de fuego para prevenir algún mal mayor” y que “la Unidad Fiscal que interviene, en este caso de Delitos Complejos, nos ha dado la directiva que se proceda al secuestro del arma, que las actividades escolares continúen, que no se las suspendan, y que una vez que terminen las clases, el alumno sea trasladado al Centro de Admisión y Derivación (CAD), para que sea entregado a sus padres con previa justificación del vínculo”.
En cuanto a la operatividad del arma, manifestó que “lo va a determinar las pericias una vez que intervenga el personal de Criminalística” y que “nosotros como primera instancia procedimos a sacarle el cargador”. En ese sentido, profundizó que “pudimos notar que se encontraba con un cartucho dentro de lo que es el cargador”.
Respecto a las medidas tomadas, aseguró que “hay un protocolo especial en estos casos. Cuando hay involucrados menores que se encuentran en conflicto con la ley, tal es este caso porque no deja de ser un arma de fuego que puede haber estado operativa y producir un mal mayor”.
Finalmente, descartó de plano que haya habido heridos, “aparentemente lo tomó como una travesura, como una fanfarroneada ante sus compañeros, porque en realidad el arma es del padre, quien manifestó que la tiene en el domicilio por cuestiones de seguridad” e instó a que “los adultos ejerzan un mayor control sobre los chicos, más que nada en el momento que concurren a un establecimiento educacional, sobre todo si tenemos armas en nuestras casas”.