Nueve provincias ya estrenaron en las urnas el año electoral: Neuquén, Río Negro, Jujuy, La Rioja, Misiones, La Pampa, Salta, San Juan -aunque no se eligió la categoría gobernador- y Tierra del Fuego. En ese sentido, el mapa de la Argentina comienza a “pintarse”, según las fuerzas a las cuales responden las autoridades locales.
Salvo en Neuquén, en los restantes distritos se impuso el oficialismo provincial. Y en aquel caso, debe precisarse que el partido que se quedó con la gobernación -Comunidad- surgió de una escisión del Movimiento Popular Neuquino; uno de los partidos provinciales con mayor historia en el país.
En Misiones también se impuso una fuerza local, que viene construyendo una hegemonía a partir de triunfos en los últimos comicios: el Frente Renovador de la Concordia. Si bien el nombre coincide con la agrupación que en el ámbito nacional lidera el ministro de Economía, Sergio Massa, esta la precede, y nada tiene que ver con ella. De hecho, se reivindica independiente, tanto del Frente de Todos (FdT) como de Juntos por el Cambio (JxC); aunque con buenos vasos comunicantes con ambos espacios. El gobernador electo, Hugo Passalacqua, cosechó más del 64% de los sufragios.
Partidos locales también ganaron en Río Negro y en Salta. En “La Linda”, el mandatario, Gustavo Sáenz, logró la reelección, a partir de un discurso “antigrieta”. Tampoco se encolumna detrás de ninguna de las dos principales fuerzas nacionales. En la provincia patagónica, alrededor de Juntos Somos Río Negro se agrupan desde camporistas hasta radicales. Pero el gobernador, Alberto Weretilneck, muestra mayor afinidad hacia la Casa Rosada.
En Jujuy, el delfín del presidenciable de Juntos por el Cambio Gerardo Morales (Unión Cívica Radical) se impuso con comodidad. Claramente el Frente Cambia Jujuy aporta un rotundo amarillo al mapa de colores políticos del país.
Por el contrario, en La Pampa, en Tierra del Fuego y en La Rioja triunfaron los oficialismos que se ubican dentro del paraguas del FdT. Sendos gobernadores -Sergio Ziliotto, Gustavo Melella y Ricardo Quintela, respectivamente- resultaron cómodamente reelegidos; y en el caso del fueguino, le sacó 40 puntos a su inmediato perseguidor, el PRO.
Si bien a esta altura del calendario también Tucumán habría elegido sus autoridades, la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) que suspendió los comicios para las categorías de gobernador y de vicegobernador, mediante una cautelar. Luego, a partir de las complicaciones que generaba para el desarrollo de los comicios para las categorías restantes, la Junta Electoral Provincia resolvió la suspensión total de la votación.
El fallo de la CSJN también alcanzaba a San Juan. Pero en este caso se prosiguió con la elección para las otras categorías; es decir, al electorado sanjuanino solo le resta elegir gobernador.
Lo que viene
Durante el mes que viene cuatro provincias irán a elecciones. El domingo 11 lo harán Corrientes -que no elige gobernador- y San Luis. Dos semanas después, el 25, será el turno de Córdoba y de Formosa. En julio solo votarán en Chubut, el 30. Claro que en medio de estas fechas podría colarse la reprogramación de las elecciones tucumanas.