El Gobierno ruso calificó de “extremadamente hostil” la decisión de Reino Unido de suministrar misiles de largo alcance a Ucrania y consideró que este hecho evidencia la participación del país en el conflicto bélico.
A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia afirmó: “Consideramos esta decisión como otro paso extremadamente hostil de Londres, destinado a inflar aún más a Ucrania con armas y conducir a una grave escalada de la situación en la zona de la operación militar especial”.
“(La entrega confirma) el nivel sin precedentes de involucramiento del Reino Unido en el conflicto ucraniano" y muestra su disposición a "cruzar cualquier frontera y elevar el conflicto a un nuevo nivel de principio desde el punto de vista de destrucciones y víctimas humanas”, agregó.
Rusia, a su vez, "se reserva el derecho a tomar todas las medidas necesarias para neutralizar las amenazas que puedan surgir como resultado del uso por Ucrania de misiles de crucero británicos", señaló el texto.
Y atribuyó la decisión al afán del Reino Unido de "establecerse como líder informal de la OTAN en la vía ucraniana y enemigo implacable de Rusia".
La cartera también enfatizó que "toda la responsabilidad por las consecuencias de las actividades destructivas de Londres recae por completo en los autores y ejecutores de este paso insensato".