11 Mayo 2023
El próximo lunes Blanca Vicuña cumpliría los 16 años
El lunes 15, Blanca, la hija de Benjamín Vicuña y Carolina “Pampita” Ardohain, cumpliría 17 años. El actor chileno, aún procesando su duelo, presentó en su país su libro “Blanca, la niña que quería volar”. Vicuña contó cómo vivió su dolor Pampita y cuáles fueron las palabras que elegía para acompañarla.
Mantener la fortaleza como estandarte luego de haber perdido a su hija fue contraproducente para Vicuña con el paso del tiempo. “Tenía que mirar el horror en los otros y había una determinación de que yo no podía caer. Fue lo que nos nació. Y por eso creo que mi proceso fue involutivo”, contó en la entrevista. “Diez años después, yo estaba sufriendo diez mil veces más que en ese momento”, explicó el actor.
En entrevista para Buenas noches a todos de la televisión chilena, Edgardo Fuentes consultó a Vicuña cómo había apoyado a Pampita, pese al dolor que vivían ambos. “Yo entendí el mismo día que no podía flaquear, no podía caer”, declaró el actor que pasó a ser un sostén y la contención de su esposa y familia, según contó.
El duelo de Pampita
El actor contó cómo vivió el duelo su pareja los primeros días luego del fallecimiento de su hija. “Carolina se despertaba todas las noches preguntando desesperada dónde estaba su Blanquita. Se levantaba de la cama, caminaba por el pasillo e iba a su cuarto. La buscaba como una leona desesperada”.
Ante la angustia de la modelo, a Vicuña sólo le quedaba ser su apoyo. “Sólo podía abrazarla y responder: ‘Nuestra niña está bien, está en un lugar mejor’. Como una frase que se repite, como un texto aprendido de una escena mala”.
El dolor de Benjamín Vicuña
Con su familia siempre como prioridad, Benjamín Vicuña se dispuso a tapar su dolor para servir de sostén a los demás y mantenerlos en pie. “En un principio, con mucho dolor y todo, yo tuve que ser el hombre, el padre, el proveedor, salir a trabajar. Decía: ‘El día está lindo’, ‘hagamos deporte’”, recordó contando el modo en que incitaba a sus hijos y esposa a no decaer.
En tanto el cuidado de su familia fue su motor para no decaer, sus amigos fueron el bastión para resistir los embates de la tristeza. “No sé si me va a quedar vida para agradecerles. Se organizaron para estar todos los días, eran una red de apoyo”, contó en relación a su círculo más íntimo. “Se organizaron para estar todos los días, era una red de apoyo. Iban al supermercado, pagaban las cuentas, llevaban a los niños a la escuela. Venían a almorzar y con bolsas de cosas”, relató Vicuña.
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