Por Bruno Farano
05 Mayo 2023
REGRESO ESPERADO. Banegas se recuperó de una lesión muscular y trabajó al lado de sus compañeros. Está listo para volver al equipo titular contra Patronato. La Gaceta / foto de Diego Aráoz
Eran las 17.30 cuando el portón del complejo “Natalio Mirkin” se abrió para la prensa. En la cancha número 1 el plantel estaba finalizando el segundo entrenamiento del día en medio de un clima distendido, aunque a un nivel bien intenso.
“Bien, bien... dale”. “Así, sigamos. Muy bien”. Mientras los jugadores realizaban un trabajo en espacio reducido, Pablo Frontini los arengaba desde un costado.
El entrenador asumió justo cuando la directiva había tomado la determinación de desafectar a Wilfredo Olivera, Federico Bravo, Claudio Pombo, Matías Pardo y Matías Quiroga. Por eso, mientras intenta recuperar a un equipo que anda a los tumbos en el campeonato, el DT también debe levantar la moral de un grupo diezmado y algo golpeado.
“El fútbol es parte de la vida y uno tiene que aprender a hacerse fuerte ante los malos momentos”, dijo el entrenador durante el primer contacto con los periodistas, luego de haber tomado el mando del plantel.
Es casi un juego de palabras, pero Frontini asegura ser frontal. Habló con los cinco futbolistas separados del grupo y luego con el resto del plantel. El entrenador sabe que no hay margen para lamentos; de nada sirve ponerse a llorar sobre la leche derramada cuando en el horizonte aparecen duelos claves para recuperarse y volver a soñar.
Por eso, si bien sabe que la “limpieza” significó un cimbronazo dentro del vestuario, no queda otra que cambiar el chip, mirar para adelante, trabajar con todo y comenzar a conseguir resultados. “Para eso nos contrataron. Para ganar y para que el equipo juegue bien”, resumió.
“Fue un golpe porque eran chicos queridos dentro del plantel. Pero acá hay que cambiar ese pesimismo, eso como que todo está mal, que hay presión... Hay que disfrutar y entender que estamos en un lugar ideal, en un club enorme. Eso hay que tomar a favor y tratar de pensar que todos los cambios son para mejorar”, afirmó el DT, que se encontró con un grupo shockeado por lo que sucedió en el inicio de la semana; pero también por el flojo rendimiento mostrado hasta acá en lo que va del campeonato, por la derrota impensada en Mendoza y porque recibió varios golpes increíbles.
“No es lindo que se vayan compañeros, pero ahora tenemos que enfocarnos en lo que viene. Debemos estar más unidos que nunca, mirar hacia adelante y enfocarse sólo en conseguir buenos resultados”, pidió el capitán Emanuel Dening. “En el vestuario faltan cinco personas que tiraban hacia adelante, pero son cosas que pasan. Esto debe volvernos más fuertes”, agregó Nahuel Banegas.
Cuando Frontini pitó el final de la sesión hubo suspiros. Fue una práctica súper intensa, pero los futbolistas salieron sonrientes. “Había encontrado un grupo golpeado, falto de confianza por todo lo que pasó en este tiempo. Pero poco a poco vamos cambiando. Ya está, hay que olvidarse de lo que pasó”, remató el DT, sabiendo que una victoria será clave para encarrilar la máquina.
Sólo tiene 19 jugadores disponibles
Exceptuando a los cuatro arqueros con los que cuenta el plantel, a los lesionados (Agustín Prokop y Guillermo Rodríguez) y a Nicolás Sansotre (está empezando a tomar ritmo), Pablo Frontini cuenta con 19 futbolistas para jugar el domingo contra Patronato. “En mi cabeza tengo siete u ocho que serán titulares, además del arquero. Me faltan resolver un par de posiciones”, explicó. Por otro lado, se confirmó que por la fecha 16 San Martín visitará a Güemes el lunes 15, desde las 19.
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