Lula da Silva: “Tengo intención de ayudar para sacarle el cuchillo del cuello a Argentina”

El presidente, Alberto Fernández, se reunió ayer con su par de Brasil, Lula da Silva, minutos después de haber llegado a Brasilia, con el fin de evaluar y cerrar un acuerdo de comercio bilateral. El Gobierno argentino pretende un esquema para financiar importaciones argentinas desde el país vecino y aliviar el uso de reservas del Banco Central. La comitiva que viajó con el mandatario argentino la integran el jefe de Gabinete, Agustín Rossi; los ministros de Economía, Sergio Massa, y de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero; el embajador de la Argentina en Brasil, Daniel Scioli; el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, y la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti.

Tras casi cuatro horas de reunión, Fernández y Lula brindaron una declaración conjunta para informar sobre los probables acuerdos alcanzados entre ambos países, según publicó “Infobae”. Lula explicitó su apoyo político a la Argentina, aunque no dio precisiones técnicas acerca de la cooperación económica y financiera que ofrecerá su gobierno a la administración del Frente de Todos.

“Somos solidarios con la lucha del gobierno de Alberto Fernández respecto a la situación de Argentina y la deuda. Me comprometí con hacer todo el sacrificio para ayudar en este difícil momento”, aseguró Lula. Y a continuación reveló que abrió una negociación con Xi Jinping -líder chino- para lograr que los Brics -un foro multilateral integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- aporten ayuda financiera al país que atraviesa una compleja situación económica causada por la sequía y la ausencia de reservas en el Banco Central.

Pero Lula no se detuvo en los Brics y su eventual respaldo a la Casa Rosada. El líder brasileño adelantó que dio instrucciones a Fernando Haddad, su ministro de Economía, para que apoye a la Argentina en su negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Esa negociación se encuentra en una etapa preliminar y su objetivo es cambiar las metas comprometidas al momento de firmar el actual acuerdo de Facilidades Extendidas. La posición de Brasil pesa en el board del Fondo.

“Tengo la intención de ayudar para sacarle el cuchillo del cuello a Argentina. Sabemos cómo se endeudó Argentina y a quien le prestó el dinero, por lo que no se los puede presionar así”, aseguró Lula frente a Alberto Fernández. Lula enfatizó su respaldo político, pero también aclaró que necesita garantías de la Argentina y mantener una conversación institucional con los empresarios brasileños y el Congreso. La intención de Argentina es lograr que Brasil financie las importaciones que recibe de ese país para evitar una merma de sus reservas en dólares, pero ese objetivo necesita de acuerdos políticos con los empresarios locales y una fina legislación técnica para esquivar ciertas complicaciones económicas. Massa intensificó en las últimas horas las tratativas con su par Haddad, con quien buscará acordar un mecanismo de garantías que permita un mayor uso de monedas locales en las operaciones de comercio bilateral. Una de las promesas del gobierno de Brasil es aumentar las líneas de crédito para financiar exportaciones desde Brasil hacia Argentina.

El Gobierno pagará U$S 800 millones al Fondo, mientras gestiona anticipar los giros

El Gobierno le pagará poco menos de U$S 800 millones al FMI y así agotará el último desembolso que recibió el Ministerio de Economía el último día de marzo, mientras negocia en Washington una reformulación del programa vigente y algún tipo de anticipo de los giros previstos para lo que resta del año. El Banco Central había devuelto al organismo el viernes pasado una primera cuota del último repago -por un monto similar al que cancelará ahora- en la hoja de ruta antes de que llegue la instancia de próximo desembolso, previsto para fines de junio.