Se saludaron con un beso en la mejilla, respetuosas y cordiales, antes de salir al aire. Pero cuando se encendieron las cámaras de “Panorama Tucumano”, Beatriz Ávila (Juntos por el Cambio) y Rossana Chahla (Frente de Todos) dejaron en claro que se habían elegido como rivales en un debate que tuvo chicanas, denuncias y acusaciones cruzadas.
Las candidatas a la Intendencia de la Capital llegaron puntuales al edificio de LA GACETA. Y de inmediato mostraron una coincidencia: ambas pidieron permiso para terminar de preparar sus propuestas y exposiciones en una oficina aparte. Junto a sus respectivos asesores, Ávila y Chahla permanecieron en la previa en dos despachos, separadas sólo por un pasillo. Sólo estuvieron frente a frente cuando entraron a los estudios de LG Play.
Las encuestas las ubican entre las principales aspirantes a asumir al frente del municipio. Por eso, si bien frente a los pupitres estaban también los postulantes Eduardo Verón Guerra (FR), José Vera (Libres del Sur) y Juan Paz (Frente de Izquierda), las candidatas de JxC y del FdT dedicaron buena parte de sus esfuerzos a tratar de desgastar la figura de su contrincante.
El round inicial tuvo lugar durante el primer debate libre. Fue cuando Ávila advirtió que “es gravísima la situación sanitaria que estamos pasando”, en alusión a la epidemia de dengue. Y aseguró que, desde su banca en la Cámara alta, planteó varios pedidos de informe sobre el tema para conocer “qué ha hecho el gobierno”.
Chahla, que es médica y ex ministra de Salud Pública, retrucó entonces que en el municipio “no ayudaron” y “no fueron a descacharrar” para evitar la proliferación del mosquito Aedes aegypti.
Ávila salió al cruce de inmediato y reprochó “la caradurez” del ministro de Salud Luis Medina Ruiz por responder “que gracias al trabajo preventivo, no vamos a tener dengue” en Tucumán.
La candidata del FdT cuestionó el planteo de su contendiente, y sin dejar de sonreír, afirmó que demostraba “no conocer académicamente cómo es el círculo de vida del Aedes aegypti”. “Todos tenemos responsabilidad”, aseveró Chahla. “No tienen vergüenza”, lanzó por lo bajo Ávila, mientras los conductores Federico van Mameren y Carolina Servetto avisaban que este segmento del libre había llegado a su fin.
Round dos
El segundo cruce se vio en el momento en el cual los candidatos debían formular una pregunta al contrincante situado a su derecha. Y, por el orden que había arrojado el sorteo previo al debate, le tocó a Chahla dirigirse a “Betty” Ávila. “Usted dice que tiene un compromiso muy grande con los derechos de las mujeres, y también con la salud”, señaló la médica, a modo de introducción. “Sí”, enfatizó la senadora nacional. La médica, entonces, acusó a la referente del PJS de “haber estado ausente en varias votaciones que eran importantes” en el Congreso de la Nación, como la “Ley Micaela” y la “Ley de Violencia Política contra las Mujeres”. “¿Cómo explica que no votó a favor de leyes que presentó?”, ahondó Chahla.
Ávila negó con tono firme los dichos de la candidata del Frente de Todos. “Es absolutamente falso. Quienes me conocen saben de mi lucha y la sororidad con todas las mujeres”, sostuvo. Y, a la vez que enumeraba su participación en distintas iniciativas, Chahla insistía con que “no votó”. “No mienta”, exigió Ávila. Aunque en ese momento sonó el timbre para dar por finalizado el segmento, las candidatas continuaron con los reproches cruzados, incluso con los micrófonos apagados. “Por favor, no chicanees”, se alcanzó a escuchar que protestaba la senadora. Los conductores de “Panorama Tucumano” tuvieron que recordarles el reglamento firmado, así como el compromiso de respetar los tiempos de cada instancia del debate.
Round tres
La última escena de tensión entre las candidatas de JxC y del FdT llegó también durante el debate libre. Ávila pidió “dos segundos” para responder a Chahla, quien había dejado entrever que había algo “poco transparente” relacionado a la gestión municipal. “Quiero preguntarle si le parece transparente que su socio político y jefe de campaña apriete jueces por la Caja Popular”, exclamó la senadora. “Yo no tengo ningún socio político”, refutó Chahla. Y recordó que el motivo del encuentro era plantear propuestas para el municipio. Ávila retomó la palabra: “¿Y no le parece poco transparente que se usen ambulancias del Siprosa para llevar drogas que vienen del narcotráfico y que tienen vinculaciones con el Estado? ¿Le parece transparente eso?”, lanzó la dirigente del PJS. “Es una denuncia muy grave, hay que hacerla en la Justicia; nunca vi una ambulancia llevando droga”, respondió la ex ministra de Salud. Y, mostrando un cartel, aseguró que la Asistencia Pública del municipio permanece cerrada. “Nosotros vamos a abrirla”, añadió la diputada. Finalmente, el debate libre prosiguió con exposiciones de otros candidatos.
Sonrisas para cerrar
Aunque estaban ubicadas detrás de los atriles una al lado de la otra, no hubo interacciones entre ellas durante los cortes publicitarios. La senadora y la diputada se dedicaron en los recesos a repasar conceptos junto a sus asesores. Y así llegaron al último debate libre, en el que evitaron los enfrentamientos. De hecho, el último gesto que tuvieron fue de amabilidad. Ávila y Chahla comenzaron a hablar exactamente al mismo tiempo. Se percataron de inmediato. Intercambiaron miradas y sonrieron. “Perdón”, dijeron en simultáneo. Y no volvieron a protagonizar nuevos cruces. El próximo round, en definitiva, será el 14 de mayo.