En las últimas horas, Ulises Jaitt fue consultado por la causa judicial que originó la muerte de su hermana Natacha Jaitt. Sin embargo, en el programa Mañanisima, terminó hablando de Lucas Benvenuto, el denunciante de Jey Mammon.
“Tuve un cruce con Lucas, lamentablemente. Yo estaba en otro canal y me acuerdo que en un momento leo un mensaje que me había mandado Jey, apenas explotó el tema, porque yo conté que Natacha no lo había mencionado en su investigación”, expuso Ulises.
Y añadió: “Él se lo tomó a mal e hizo unas historias golpeándome y me mandó un audio donde agredió a Natacha. Eso a mí no me gustó porque vos no te podés meter con alguien que no está para defenderse”.
Según explicó el panelista Sebastian Perello, el joven le aseguró que “Natacha estaba al tanto de las cosas que hacia Jey y que lo había protegido”.
Ante ese comentario, Ulises dijo que es “incomprobable” y que su hermana “si lo hubiera sabido, lo mandaba al frente”. “Es un golpe bajo decir algo de una persona que no está para defenderse. Lucas, producto de todo lo que le pasó, tiene conductas raras”, aseveró.
Lucas Benvenuto contó por qué decidió volver a hablar y denunciar públicamente a Jey Mammon
En diálogo con LAM, desde Ushuaia, Lucas Benvenuto explicó detalles acerca del proyecto de ley que impedirá que prescriban los abusos sexuales y otros delitos contra menoes de edad.
“La psicóloga Mariana Barrios de la Serna, el diputado Cristian Ritondo y el doctor Cristian Cazorla son los que llevarán al Congreso esta propuesta y tenemos mucha esperanza de que salga todo bien, de que es hora que estos abusos no prescriban más”, reveló en una entrevista con Ángel de Brito.
“Yo lo viví de una forma un poco bruta, por así decirlo. Porque yo empecé a hablar de esto a los seis años. A los seis años, por parte de mi familia me dijeron: ‘Mentís’. Y además se me expuso delante del abusador para que yo le diga en la cara que le estaba mintiendo. Entonces crecí en un entorno en el que estaba totalmente naturalizado”, contó.
Luego agregó: "Cada vez que hablé, se me juzgó. Y era muy chiquito. Si en tu propia familia te dicen: ‘No te creo’, lo que viene después habla solo. Esto hizo que yo demorara mucho en entender lo que me estaba pasando y lo que me habían hecho”, explicó Lucas.
“Esta experiencia hizo que naturalizara los abusos. Hasta que yo crecí, me hice adulto y comprendí por mis propios métodos lo que estaba bien, lo que estaba mal. Y al pedir ayuda a los 25 años, ahí ya cambió todo. Demoré, demoré en hablar...”, cerró.