Delfino sufrió un extraño robo antes de abandonar la provincia

Delfino sufrió un extraño robo antes de abandonar la provincia

Desconocidos le sustrajeron las pertenencias que había cargado el ex técnico de San Martín en su camioneta para mudarse. Los vecinos dudan.

UNA SITUACIÓN LLAMATIVA. El entrenador dejó en claro en la Policía que los autores violaron todas las medidas de seguridad que hay en el barrio.   UNA SITUACIÓN LLAMATIVA. El entrenador dejó en claro en la Policía que los autores violaron todas las medidas de seguridad que hay en el barrio.

La Policía y la Justicia investigan el extraño robo que sufrió el técnico Iván Delfino horas antes de abandonar la provincia. El hecho de inseguridad se registró en un barrio privado de Yerba Buena que cuenta con todas las medidas de seguridad.

El viernes, el ex entrenador de los “santos” llegó a la comisaría a realizar una denuncia. Según confirmaron fuentes judiciales y policiales, informó que desconocidos lo habían despojado de las pertenencias de su camioneta Toyota Hilux que había dejado estacionada en el barrio que se construyó en los predios del ex Seminario, en Yerba Buena.

Delfino dio varios detalles sobre cómo fue el robo. Relató que el jueves, después de haber quedado desvinculado del club de La Ciudadela, cargó todas sus pertenencias en el vehículo que estaba en la playa de estacionamiento construida en un subsuelo.

El viernes, cerca de las 8.20, cuando se preparaba para iniciar el viaje que lo llevaría a su Santa Fe natal, descubrió que desconocidos habían violentado la lona cobertora de la caja y luego le sustrajeron todos los elementos que había colocado allí.

Delfino destacó que le habían robado dos valijas y un bolso donde tenía toda su ropa de vestir. También le sustrajeron un televisor de 29 pulgadas, una computadora, un disco rígido, una guitarra y varios elementos personales, como una colección de cuchillos artesanales.

El entrenador, que tuvo un efímero y polémico paso por los “santos”, dejó constancia de que, pese a que el lugar tiene vigilancia las 24 horas y cuentan con cámaras de seguridad, nadie vio nada y tampoco quedaron registros del robo.

LA GACETA intentó comunicarse con Delfino para que diera a conocer su opinión del hecho, pero el técnico no respondió las llamadas ni contestó los mensajes. Las personas que más compartieron con él en su paso por la provincia dijeron que no lo hizo porque estaba viajando o porque descansaba después de haber llegado a destino.

La pesquisa

“Se está investigando la denuncia que realizó el señor Delfino. Sabemos que después de hacer la presentación viajó a su ciudad de origen. Quedamos en seguir comunicándonos para que agregue mayor información o le transmitamos las novedades del caso”, señaló el jefe de la Unidad Regional Norte Joaquín Girbeaux.

El funcionario confirmó que a la víctima del hecho le llamó la atención que los delincuentes se hayan apoderado de todas sus pertenencias en un lugar que cuentan con importantes medidas de seguridad. “Estamos analizando todo y pediremos en el lugar elementos que nos ayuden a esclarecerlo”, añadió.

El robo a Delfino se registró horas después de que se conociera la versión de que barrabravas “santos” se presentaron en el aeropuerto a recibir a los jugadores después de la derrota que sufrieron contra Defensores Unidos. “No podemos afirmar que haya una cuestión de estas características. No tenemos las pruebas, pero sí es llamativo el hecho. Vamos a investigar todo”, confirmó el comisario a LA GACETA. “También es extraño que le hayan sacado todo lo había acomodado porque se estaba mudando”, agregó Girbeaux.

LA PEOR DESPEDIDA. Iván Delfino sufrió el robo de sus pertenencias antes de viajar. LA PEOR DESPEDIDA. Iván Delfino sufrió el robo de sus pertenencias antes de viajar.

Sorpresa

Casi ningún vecino sabía del robo. Muchos de ellos se enteraron cuando el cronista del diario les comentó. “Es muy extraño todo porque ahí siempre hay vigilancia. Esta zona no es muy insegura, sí estamos acostumbrados a algún que otro arrebato, pero son salteados”, explicó María Laura de Paz, que no sabía quién era la víctima.

Justo Herrera, fanático de los “santos”, tuvo otra opinión. “Vivo en el barrio y si fuera un ‘choro’ el lugar donde no entraría es ahí. Está lleno de vigilancia las 24 horas del día. Nadie entra ni nadie sale sin ser controlado. Para mí hay otra cuestión detrás”, opinó.

“En esta provincia puede pasar de todo. Que ladrones ingresen a lugares donde es impensado que puedan robar o que a un técnico que le fue mal lo hayan despedido con un mensaje mafioso. Ojalá que este caso se aclare para que no queden dudas en el ambiente. Quizás Delfino vaya a Buenos Aires y cuente una versión de los hechos que haga quedar mal a los tucumanos”, reflexionó Fernando Suárez.

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