Uno viene a Tafí del Valle desde hace nueve años y el otro, desde hace cuatro. Agustín Vernice y Valentín Rossi tienen la certeza de que, con el entrenamiento en altura que realizan en la villa tucumana, se preparan de la mejor manera para eso que nunca se puede asegurar en la carrera de un deportista: ganar.
Los palistas pasaron varias semanas entrenándose en el dique La Angostura, acompañados por Diego Cánepa, el entrenador nacional. Ambos serán parte de la delegación que buscará lo que propuso el técnico ya hace un tiempo. “Volver a ser protagonistas”, refirió Cánepa con respecto a lo que se avecina en la agenda de la selección de cara a los Juegos Panamericanos de Chile, que se realizarán en octubre.
Si bien Argentina tuvo un buen rendimiento en la edición de 2019, en Lima, Cánepa reconoce que Brasil y Colombia tienen un sistema que a lo largo de la historia superó al nacional.
“Hay que estar de la mejor forma”, avisó Vernice pensando en esa meta propuesta por Cánepa. “Al canotaje argentino a nivel sudamericano y panamericano lo veo bien”, analizó con optimismo Rossi. Sin embargo, el palista considera que es más difícil ubicar a Argentina entre los primeros puestos más allá del continente. “A nivel mundial, en especial con los europeos, tenemos un abismo”, comparó Rossi.
Los dos tendrán sus Mundiales antes de la competencia chilena, precisamente en tierras europeas. Un escenario ideal para llegar más afilados, aún teniendo en cuenta el reposicionamiento histórico que se busca. Vernice irá a Duisburg, Alemania, entre el 23 y 27 de agosto. El olavarriense no sólo buscará una medalla mundialista; también un lugar en los Juegos Olímpicos. “Más allá de la clasificación, el Campeonato del Mundo es el segundo evento más prestigioso después de los Juegos, así que apunto a llegar en buena forma física a esa competencia”, explicó el palista de 27 años que, a largo plazo, tiene como meta París 2024. “Siempre sueño con pelear por una medalla, es lo que me motiva a diario”, reconoció Vernice que en Tokio 2020 quedó octavo.
La mira olímpica de Rossi, en cambio, apunta hacia Los Ángeles 2028. Él tiene 21 años y tiempo para sumar experiencia en Sub-23, categoría que tendrá su cita mundialista del 5 al 9 de julio en Itauronzo, Italia. “Siempre un deportista piensa en llegar a un Juego Olímpico de mayores y conseguir una medalla. Es tocar el cielo con las manos. No creo que llegue a París, porque mis tiempos están bastante lejos, pero estoy con muchas ganas de clasificarme para los Juegos siguientes”, deseó el palista.
Tanto Vernice como Rossi dan por hecho que volverán a Tafí para aprovechar las ventajas del entrenamiento en altura, a fin de acondicionar de manera natural su físico para concretar esos sueños olímpicos. “En cuanto al entrenamiento ya sé con lo que me voy a encontrar; por eso vuelvo siempre”, indicó Vernice sobre las buenas sensaciones que se lleva cada vez que se entrena en Tafí del Valle. Rossi aportó el factor que les sirve del lugar situado a más de 2.000 metros de altura sobre el nivel del mar: “en marzo, el lago por la mañana fue un espejo; eso es lo que más nos gusta”, calificó el palista, destacando el poco movimiento del agua.