Por Lucía Lozano
08 Abril 2023
OPERATIVOS EN BARRIOS DE LA CAPITAL. Después de varios días de lluvias, los agentes sanitarios volvieron a revisar las casas en las zonas afectadas. LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI
Lluvia, humedad y recipientes es lo que necesita el mosquito Aedes aegypti para reproducirse. Después de una semana con muchas precipitaciones, las autoridades sanitarias advierten que en los próximos días podríamos tener más casos de dengue.
En plena epidemia, con más de 10.000 contagios en nuestra provincia, los médicos, agentes sanitarios y otros expertos insisten en que debemos eliminar todos los cacharros de nuestras casas. La ecuación parece sencilla: sin recipientes no hay mosquitos, y sin mosquitos no hay dengue. Sin embargo, no es tan sencillo, según aclara la biología y docente de la UNT, Gabriela Quintana.
“Es difícil pensar en una erradicación total del mosquito que transmite el dengue, pues dependemos de la circulación en otras regiones y además, el mosquito creó resistencia ya en varias localidades probablemente por el mal uso de las intervenciones químicas, las que solo deberían aplicarse ante la aparición de casos humanos y en las dosis adecuadas que realizan desde los sistemas de salud”, resalta.
Por eso, la especialista cuestiona la falta de control sobre el uso de insecticidas. “En momentos de brote la gente comienzan a solicitar fumigaciones a destiempo con aplicaciones no controladas lo que finalmente permite a estos insectos crear resistencia”, dice.
- ¿Cuáles son los lugares más impensados donde se cría el Aedes aegypti?
- Prácticamente, aunque se pone el foco en los principales recipientes generadores de sitios de cría, algunos son de difícil acceso como tanques sin tapar o canaletas. Existen además sitios crípticos que pasan desapercibidos, como plantas en agua tanto en viviendas como en los cementerios que aún cuando hay disposiciones municipales las personas siguen sin considerarlos. Y particularmente en nuestra provincia el poco o nulo manejo de los residuos sólidos urbanos y las generaciones de microbasurales a lo ancho y largo de las ciudades, particularmente en aquellos barrios vulnerables donde la recolección de residuos no se presenta y la carencia de agua de red, incrementan la disponibilidad de sitios críticos.
- ¿La gran cantidad de casos que actualmente registra Tucumán indica que no hicimos bien el trabajo en nuestras casas?
- En realidad hay distintos factores que determinan la situación actual. Por el lado biológico al circular un nueva cepa (el DEN2), eso significa que hay mayor susceptibilidad porque no estamos inmunizados. En el brote 2020 tuvimos cepas mayormente DEN 1 y en menor medida DEN 4. En relación al trabajo que debíamos hacer en nuestras casas sucede que cada periodo interepidémico, que es donde realmente podemos tomar la medidas preventivas, nos confiamos o simplemente nos olvidamos de tomarnos el tiempo de prepararnos para el nuevo brote.
- ¿Hay nuevas investigaciones sobre el mosquito?
- La generación de conocimiento y especialmente en la temática de las arbovirosis es contínua en distintos aspectos relacionados al vector, tanto en su ecología, comportamiento y estrategias de control efectivas. Muchos de los métodos novedosos que aparecen en estos tiempos terminan resultando inaplicables en algunos ámbitos (espacios geográficos) ya sea por su poca seguridad o por un alto costo efectivo en los resultados, difícil de mantener en el tiempo. La mejor manera de pensar soluciones en la salud pública tiene que ver con el manejo integrado en el control de vectores según cada escenario de transmisión, idea aún difícil de internalizar y planificar.
- ¿Cuáles son los pro y los contra de las fumigaciones?
- Los pro y contras tienen distintas aristas. Primero que solo cubren, en el caso de no haber resistencia en el vector, el 60% y deben aplicarse solo en circunstancias de brote. Segundo punto: deben ir acompañadas cuando correspondan con otras estrategias de control como el saneamiento. La tercera consideración muy importante es que tienen que ser realizadas por personal capacitado e idóneo de los sistemas de salud.
Casos por día: el análisis de los fallecimientos
Casi 500 casos de dengue por día se reportan en nuestra provincia, la segunda con más contagios en el país, según el Ministerio de Salud de la Nación. Los sectores más afectados son Lules, San Miguel de Tucumán, Yerba Buena, Tafí Viejo, Banda del Río Salí, Alderetes y Las Talitas. Hasta el momento, las autoridades provinciales oficialmente informaron cuatro muertes por la enfermedad que transmite el mosquito Aedes aegypti. Aunque familiares reportaron otros pacientes que tuvieron síntomas y fallecieron (al menos tres casos), desde Salud aclararon: ante cada caso sospechoso de muerte, se realiza un análisis de datos clínicos, epidemiológicos y de laboratorio. Considerando esto, otros pacientes que fueron analizados no reúnen criterios para asumir que la muerte fue a causa de esta patología.
Los síntomas de la enfermedad
- Fiebre alta, dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones.
- Náuseas y vómitos, diarrea.
- Cansancio intenso.
- Aparición de manchas en la piel.
- Picazón y/o sangrado de nariz y encías.
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